FUSIÓN
En la ladera de la montaña, existe una cueva que pocos conocen; sólo Toñín sabe de sus bifurcaciones, de su humedad, de las telarañas con la que tropezaba acompañando al padre y a un par de amigos, sombríos, taciturnos, oscuros como aquel espacio tenebroso. Ahora, después de los años, sólo quiere que sus huesos descansen allí, donde los otros, en una amalgama blanca que no entienda de ideas, odios ni venganzas.
En la ladera de la montaña, existe una cueva que pocos conocen; sólo Toñín sabe de sus bifurcaciones, de su humedad, de las telarañas con la que tropezaba acompañando al padre y a un par de amigos, sombríos, taciturnos, oscuros como aquel espacio tenebroso. Ahora, después de los años, sólo quiere que sus huesos descansen allí, donde los otros, en una amalgama blanca que no entienda de ideas, odios ni venganzas.
FULGOR
Según se acerca, comprueba que no es oro. Ha caminado en su busca, como los viejos mineros del Yukón, y ahora, aquel brillo seductor se le escurre entre los dedos, frío y ajeno.
TOUR
Con delicadeza, revisa las cajas donde guarda los cromos de aquellos deportistas famosos en su infancia.
En una de ellas, envuelto en un algodón amarillento, el mayor tesoro que conserva: uno de los dientes del ciclista al que se le partió el cráneo, muerto frente a su casa.