A mí, nubecilla errante y desarraigada,
¿me aceptarán estos muros cálidos entre sus brazos?
Texto y foto, Virginia
A mí, nubecilla errante y desarraigada,
¿me aceptarán estos muros cálidos entre sus brazos?
Te esperaré hasta que caiga la última flor, le dijo.
Uf, vaya un antiguo, pensó ella, no vuelvo seguro.
Y así lo hizo.
De él no sabemos más.
Texto y foto, Virginia