martes, 27 de abril de 2021

 

¡Quién me iba a decir que la soledad era esto!



Texto y foto, Virginia

domingo, 25 de abril de 2021

Contreras, La Gomera

 

Anclada en una extensa lomada de bancales, la casa señorial de Contreras  reina orgullosa sin que le importe la soledad del entorno. Con alzado de dos plantas, buenas maderas, tejado a cuatro aguas, anexos varios,  huecos al horizonte atlántico y a las otrora bien plantadas huertas, fue edificada a finales del s. XVIII. Su estampa soberbia domina un paisaje verde y luminoso cuando las lluvias han sido generosas, o marrón y gris si la seca veraniega se alarga en demasía.


Apetece apoyarse en el quicio de la puerta principal para contemplar la vastedad de las terrazas y descansar en uno de los asientos de riñón, imaginando que en el patio alguien carga un mulo con sacos de paja o unos niños juegan entre las tabaibas y los verodes. Subir la escalera recia y contundente hasta los restos del balcón, atisbando en la lejanía el triángulo azul del Teide. Con poco esfuerzo hasta podríamos ver  alguna mujer moliendo el cereal, mientras el gofio se derrama por los bordes de la piedra redonda y plana.



En la bodega, entre bidones, cajas y barricas, el polvo danza por los canalillos de luz que entran por ventanillos y postigos, esos que ya nadie abre ni cierra. El baúl de herrajes duerme a la sombra de las paredes encaladas, en algún tiempo contuvo billetes traídos de Cuba o Montevideo, un reloj de leontina, una frazada de paño, un vestido de bautismo con volantitos blancos.

La casa de Contreras, cerca del barranco del mismo nombre, aguarda estoica a que la admires. Aunque tardes en llegar desde cualquier punto que salgas -tan distante del mundo se encuentra- el esfuerzo valdrá la pena, tanto, que llegarás a quererla, enternecida de su fuerza ante la orfandad absoluta, rota sólo por los lagartos, el vuelo rasante de un cernícalo, unos escarabajos ensimismados.


O por el sonido de nuestras voces, impactadas con la hermosura de la casa de Contreras, tan lejana, tan insólita, tan segura de sí y de la vida que creció en derredor.



 Texto y fotos, Virginia        

sábado, 24 de abril de 2021

 

Las nubes se chiflan por los churretes de chocolate.




Texto y foto, Virginia

miércoles, 21 de abril de 2021

 

La primavera no entiende de abandonos.



Texto y foto, Virginia

domingo, 18 de abril de 2021

Oportunidad


 

Fascinada por la Geometría, se llevó la clase al pasadizo recién descubierto. Allí había visto cuadrados y triángulos, círculos, paralelas y perpendiculares, ángulos de todas clases y hasta la mejor forma de explicar el número áureo.

Bien sabía que la escuela se puede encontrar al borde del camino.


Foto y texto, Virginia


jueves, 15 de abril de 2021

Fárrago



Había cucharas, periódicos, una cocinilla oxidada, barricas, vasos y platos, un inesperado suelo rojizo de ladrillos fraileros cubiertos de tierra, una cartera vacía, papeles, la virgen enmarcada sobre la pared tiznada, la cortina rasgando la mitad de la cueva. Una mesa valiosa,  antiguos los cabezales de las camas. También la destiladera, olvidada entre los trastos, sin agua, sin vida.




El tenedor con mango de hueso hizo ademán de contarme su historia, pero yo, embobecida en aquel espacio caótico y bello, no tuve oídos para escucharlo.



Ahora solo me queda el recuerdo de un momento, tan frágil como las vidas que usaron las camas y las colchas, los calderos, las sillas. Quienes se miraron al espejo antes de salir al campo, a buscar agua, a coger hierba, a plantar el grano.

O tan solo por verse una vez más antes de morir.


Texto y fotos, Virginia

miércoles, 14 de abril de 2021

Permuta




Sin previo aviso y conectadas por el hilo invisible del Arte y la Historia, un buen día dos diosas bajaron al unísono de los pedestales y se encontraron en una esquina.

A salvo de turistas, fotos, restauraciones y murmullos de admiración, se ven de cuando en cuando y conversan, no sabemos cómo, pero lo hacen, sí, sobre sus vidas milenarias.

Venus vive al borde de una playa nudista, libre y salvaje. Victoria trabaja en una organización de minusválidos.


Texto y fotos, Virginia
Museo Arqueológico de Atenas

sábado, 10 de abril de 2021

Código

 


La casa tenía una pauta inalterable, solo se podía entrar de tres en tres.

Allá se fueron Los 3 Mosqueteros, los Hermanos Marx, el Trío Los Panchos y el Trío Calavera, cualquier clase de triángulos, las acículas del pino y las Tres Gracias, las pirámides de Egipto, las cruces de un Calvario, los tres puntos por donde pasa un plano y solo uno, el Triángulo del Verano, Anais Nin con Henry Miller y June, Lou Andreas con Nietzsche y Freud, las tres patas de un banco, el trío de ases del mejor tahúr.

Lo que pasó dentro ya es otro cantar.


Texto y foto, Virginia

martes, 6 de abril de 2021

Ponzoña

 


Cuando hallaron el cuerpo en un cuartucho abandonado, 

el forense dictaminó que había fallecido por exceso de clorofila.

 


Texto y foto, Virginia



domingo, 4 de abril de 2021

Orfandad

 

Cuando en un futuro 

seamos huérfanos de patrimonio, 

no sabremos ni quién, ni cómo, 

ni porqué, ni cuándo. 


Nada.






Texto y foto, Virginia

viernes, 2 de abril de 2021

 


Convierte los obstáculos en estímulos y verás mejor el paisaje.


Texto y foto, Virginia