viernes, 30 de diciembre de 2011

Comienzo

Cada una de las campanadas rompía una esperanza. Había prometido recogerme antes de las doce, y allí estaba yo, agazapada en el sillón de la casa, contemplando con tristeza los bailes, el descorche, los brindis, las frases ya conocidas. Mi vestido tiritaba de frío, los zapatos eran incómodos, y la mochila, con un escaso par de cosas, esperaba impaciente en la entrada.

Me echaron una manta por encima y dormí durante un rato.
Desperté al sonido de un timbre. Alguien tocaba con insistencia.
Al abrir la puerta, allí estaba. Mi padre, mi héroe.
En sus brazos, voló la angustia entre confetis y serpentinas.
Niña entre dos mundos, empecé el año como más deseaba.






Foto Virgi


Relato publicado en EURO - PA – LABRA, el pasado 21 de diciembre.

Mi agradecimiento y la esperanza de que la labor realizada por este blog no caiga en saco roto. Gestionado desde el Punto de Información Europeo (que ahora se cierra) en la comarca de Saja-Nansa, Cantabria, dedicaba una sección a relatos en 100 palabras, consiguiendo un elevado número de visitas en un corto espacio de tiempo.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Infortunio

Navidad para alguien sin suerte:
una herradura oxidada, un recuerdo sangriento, la luna tan lejos
y ella... ¡ah, ella!...
en el 12A, que nunca encontró.















Mis gracias a La Esfera Cultural.
Aún con sangre, la suerte me sonríe.





Fotos Virgi

viernes, 23 de diciembre de 2011

Navidad


Que lluevan estrellas.
Que traigan polvo de vida para seguir adelante en tiempos difíciles.
Que se abran las ventanas.
Que la luz entre y nos caliente.

Que seamos todo lo felices que la vida, las estrellas y los tiempos nos permitan.
Ternura, besos, sonrisas…Feliz Navidad!!!


viernes, 16 de diciembre de 2011

Avance


Avanza la oscuridad entre la luz. Sobre el piélago azul se recortan las torres, que, tímidas, quisieran crecer más allá de los tejados. No saben que en cuanto la luz las abandone, serán pasto de la noche. El poder de las sombras barrerá los colores, las formas y el brillo del día.
Una cúpula aquí, un campanario más allá, dibujan la geometría del horizonte, el cercano, aquél que aún podemos alcanzar antes de la noche. Se han ido las palomas, los lagartos duermen bajo las tejas, las mariposas baten sus alas en el jardincillo, festoneando la tarde con el aleteo fugaz y rutilante de los insectos prodigiosos.
Yo veo un cielo sin nubes, la línea blanca y quebrada de este horizonte posible, las minúsculas plantas más arriba de la tierra. Y según voy viendo, la sombra progresa y el horizonte se difumina. Nada ha de quedar, ni la luz para ver la oscuridad.



Foto Virgi

sábado, 10 de diciembre de 2011

León

Se larga el león.
Ufano, ni el hociquillo se le adivina.
Sale por la izquierda, se va de la escena donde alguien lo sigue.
Languidece la tarde y las uñas le crecen entre los rastrojos.
El ocaso es azul
azul
azul
como el espejo irisado del mar lejano.

No ha visto el niño al león en la sabana, no.
En su fuero interno sabe de su cola, de sus garras de fiera y de su melena al viento. Antes de que caiga la tarde, el león, paso a paso, entre las yerbas, dejará las huellas sobre el papel donde un niño pinta y caza al rey de la selva.

Con su andar firme, el león lo mira y aprueba la cacería.



Dibujo de D. G., 6 años

lunes, 5 de diciembre de 2011

Sin

Un sol sin luna.
Una bola sin green.
Un cuerpo sin sombra.
Un planeta sin órbita.

Una naranja sin rama.
Un balón sin oxígeno.
El silencio sin rumores.
La luz sin brillo.

Un salto sin réplica.
Una raqueta sin pelota.
La curva sin fin.
El círculo sin radio.


La esfera en un mundo cuadrado.
Una cuadratura sin solución.







Foto Virgi

miércoles, 30 de noviembre de 2011

Pupila y palabra XXVI



 Sombras


Reverberaba la luz en las paredes y las sombras acudían a cubrir mi huída. El silencio del mediodía restallaba en las azoteas, haciendo del sol el único dueño del silencio.
Allá abajo, en la playa, las olas cedían el cuerpo de un ahogado.

La cal de los muros coloreaba un lamento. Un niño había caído al mar de las Cícladas, el mar de los rostros de mármol, milenariamente modernos. Un niño con el que iba a la escuela, que me regaló uno de mis gatos preferidos, uno entre todos los gatos griegos.

Subía los escalones de piedra y con cada paso, me acercaba a la vida real, la de las líneas quebradas, rotas. Los rectángulos, los cuadrados, encerraban un misterio incapaz de penetrarlo.
Sin saberlo, pero con el aroma de lo que se aproxima, sentía que las sombras no eran sólo las que me iban protegiendo hasta mi casa.
Hube de intuir el pálpito de la soledad, la creciente marea de lo incomprensible, una herida ya para siempre.
La luz diáfana y eterna me conducía, veloz, por la escalera de la muerte.


Dos mil quinientos años antes, un joven griego es enterrado en Paestum, Nápoles. Queda de su tránsito por la vida, una bellísima pintura en la tumba donde reposaba.
Mi pequeño homenaje a quien lo pintó, en el blog EURO – PA- LABRA.


Fotografía de H. Cartier-Bresson, Isla de Sifnos, Grecia (1961)

Gracias a Elvira y a Isabel.
Ellas saben el porqué.

viernes, 25 de noviembre de 2011

Cuelgue

Me colgaré de las guedejas del cielo.





No habrá guardianes que impidan columpiarme entre las nubes.





Ni la montaña logrará alcanzarme.



Fotos Virgi

miércoles, 23 de noviembre de 2011




Agradezco a La Esfera Cultural la publicación de mi relato "Error" y los invito a leerme allí.



domingo, 20 de noviembre de 2011

Regreso



Alguien vendrá.
Con las muletas de andar por el mundo.

No ha de traer la llave.
Ni un plano para reconocer la casa.
Le dolerá
el hígado
las muelas.

Los huesos
allá adentro.



Vendrá con su saco de recuerdos,
encima la viga,
aquí la puerta,
la ventana a lo lejos.



Una grieta carmesí
brillando bajo la luz.

Imposible de cerrar
imposible de curar.

Volverá.
Sin saber para qué.




Fotos Virgi

martes, 15 de noviembre de 2011

Pupila y palabra XXV




Celda


William Hogarth tenía ya fama como pintor cuando acude a la cárcel para conocer a Sarah Malcolm. Corre el año 1733 y la joven en pocos días será ajusticiada. El porte orgulloso y la seguridad de sus movimientos impactan al artista, que la observa con respeto. La celda es oscura y las partes blancas de los ropajes semejan gruesas pinceladas de luz. Casi no habla con ella, acusada de robo y asesinato a su ama y a un par de familiares. En la cámara, húmeda y fría, se huele la desolación.
Nunca se supo con certeza como fue el crimen, pero el pintor consigue traernos a alguien a punto de morir, mientras por los huecos de la puerta creemos oír lamentos, gritos, oraciones.
Sarah pide un rosario y se sienta a esperar la llamada del cadalso.
Hogarth la pinta con lejanía, lozana como joven que era, sin vacilación ni remordimiento. Con los brazos cruzados, tanto parece importarle el ajusticiamiento, como que el pintor acabe de una vez su retrato. El artista la coloca a un lado del cuadro y al otro, la puerta, símbolo que desde los egipcios había que traspasar para llegar al más allá.
Cualquier simbología está aquí ajena a Sarah Malcolm. Los ojos negros perforan el aire enrarecido de la celda y ven lo que nosotros no logramos imaginar.


William Hogarth, con su realismo vanguardista, nos transmite la duda de si la verdad o la mentira pueden tener algún valor frente a la muerte.




William Hogarth (1697-1764)
Sarah Malcolm, 1733
Galería Nacional de Escocia

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Miradas IV




Con tanto rumor, nunca supe cuál era el verdadero.







Al beber, se hizo de porcelana.





Delicioso escaparate donde leer el periódico.





Navegar más allá de la luz.


Fotos Virgi

jueves, 3 de noviembre de 2011

Salto

Como una araña precisa y experimentada, se colgó de la hoja. El rojo la llamaba con fuerza y el vacío le era ya sobradamente conocido. Cogió impulso y ¡zas! se lanzó.





Atravesó una lluvia de copos que enfrió su corazón ardiente. Tardaría un tiempo, décadas tal vez. Nada arredraba el salto que había dado, ni el calor, ni el hielo de las miradas. Si acaso, los copos templaron su piel.






Quería cruzar al otro lado, el muro la esperaba, impávido y lejano. La tarde se estremecía con la luz del otoño, sorprendente entre las nubes como elipses, como cuerdas, como líneas trazadas por los dioses con los colores del Olimpo.





Se hizo gris en la paleta del cielo.



Fotos Virgi

sábado, 29 de octubre de 2011

Anclaje

un paso
un vuelo





sobre el silencio





el humo





las piedras




y yo
tan anclada a la tierra



Fotos Virgi

miércoles, 26 de octubre de 2011

Fringe




Después de dos meses, aún me queda el aroma colorido y ruidoso del Festival Fringe de Edimburgo. Calles rebosantes de gente. Actores que bailan, cantan, te regalan globos, flores, sonrisas, invitaciones. Aquí una actriz jovencísima, más allá un equilibrista. En medio, un titiritero o un contorsionista. Músicos, bailarinas, ilusionistas, mimos.
Actúan en plazas y jardines, debajo de los árboles y sobre los adoquines húmedos. Encima de un taburete, una bicicleta o una barra. Medio desnudos, o vestidos con ropas de época, cubren un recorrido subyugador y repleto de ideas sorprendentes.
Sueltas una libra, más allá dos, sentada en el parterre sonríes, de pie olvidas que tenías hambre, desde una terraza oyes un coro, tomas la sopa del día viendo vampiros, acróbatas, doncellas, bailarines de claqué, un gaitero inasequible al desaliento o una mujer de rojo sobre los travesaños de una escalera.




























Es el Fringe


Para Sue, porque hubiera estado genial encontrarnos en la Royal Mile. Por ejemplo.


Fotos Virgi

viernes, 21 de octubre de 2011

Seguimos




















15 octubre en Tenerife
Fotos Virgi