Los triángulos también existen,
con sus senos y cosenos, hipotenusas y elevaciones al cuadrado.
El triángulo de
las Bermudas, el del cielo veraniego con Vega, Deneb y Altair, el triángulo
amoroso de Anäis Nin, los fractales de Sierpinski, la torre Eiffel, las
pirámides mayas y las egipcias.
Y aquí, recordando la erupción
del Chinyero, entre higueras, almendreros, viñas, escobones y tuneras.