jueves, 20 de febrero de 2014

Mínimo

El vacío






El vértigo de caer entre la espuma



                                       
   
                                                   El blanco







                                     La levedad de un movimiento
  



                                   Y el mar, barriéndolo todo.



Fotos y texto, Virgi

viernes, 14 de febrero de 2014

Voces XIII





Al solajero estaban los chonis, ellas bien repantigadas, a ver si les da un yeyo, y ellos como guachimanes, controlando; empenados se quedarán, sobre todo el totizo…¡chos, y con esas cholas se van a dar un partigazo, sólo les falta la guayabera!

Y de la tonga de piedras que tienen debajo ya podían trincar las más menúas  y arrayarse alguna, mérito tienen ahí sobre los callados, ¡chiquita machangada!

Lo chachi que estarían sobre las falúas o encima de las rocas, sin miedo a machucarse un ñoño, pues no, van y se emperran en empericosarse en medio los toniques.






Pardiando, con seguranza, se visten por parejo y se van de tenderete, engolosinados comiendo papas con carne o viejitas asadas, gofio amasado y un buen buche de vino… ¡con el jilorio que tenían en la playa! Y bien pachorrudos, que pa’ eso están de holideis.



Mientras, yo aquí, como una pazguata, escribiendo sobre los guiris, sobajiando las teclas en vez de orearme un poco y no estar tan momia. Y si no, me pongo el pulover, llamo al chorbo y en el haiga nos aventamos pa’ la cumbre, pal chozo en el veril del barranco.






Fotos y texto, Virgi

miércoles, 12 de febrero de 2014

Viaje





“Movidos por el deseo y la ambición de compartir su pasión por los universos culturales y los imaginarios de España y de América Latina, los traductores, traductores en práctica y traductores estudiantes de Tradabordo le invitan a descubrir esta antología virtual de cuentos y microrrelatos”


De esta manera se presenta el proyecto LECTURES D'AILLEURS, de la Universidad de Poitiers. Una antología viva y abierta, dentro de la que me han incluído cuatro microrrelatos. 
Que mis palabras viajen en este barco representa una satisfacción inmensa. Espero hacer honor a esa travesía generosa, y que la misma contribuya a enriquecerme, dada la compañía en la que viajan estas pequeñas criaturas, alimentadas por la lectura mucho antes de nacer.
Desde aquí, mi agradecimiento una vez más.







                                 (y si les apetece leer la entrevista, aquí


viernes, 7 de febrero de 2014

Piedras





Observó la piedra, brillante, oscura. 
Era como un cubo de basalto, desprendido de la roca enorme al pie de la montaña. Nunca había entendido aquello de “menos da una piedra”… ¡ah, las piedras, testigos milenarios, silenciosos, humildes!  Iba recolectando pequeñas piedras en sus viajes y construía con ellas murallas en miniatura con las que imaginaba Troya, Tenochtitlan, el Muro de Adriano, Cnossos, Pérgamo o la Atlántida.


 

Las había recogido en caminos, playas, montañas, jardines, iglesias en ruinas y castillos abandonados. Cada maleta pesaba siempre algo más pero no le importaba dejar alguna pertenencia, a cambio de cargar un nuevo elemento a su colección.

 












Las tenía rugosas, pulidas, redondas, con estrías, rojas, grises, con vetas, verdes, plateadas. Las piedras le hablaban y ella entendía sus historias. Eran un aliciente, una forma de condensar el mundo, las gentes, los países, las costumbres…en las edificaciones minúsculas que luego construía.
Una personal manera de sentirse útil consigo misma, pegando aquellos trocitos unos con otros, como una metáfora de lo que pensaba debía ser el mundo.














Fotos y texto, Virgi