jueves, 26 de enero de 2012

Intercambio



Llegué hasta la estatua de sal.
Con mi lengua, pertinaz y consecuente, fui desgranando los cubos salados que cubrían su piel.
Así, logré arribar primero hasta un lóbulo. Pudo oírme.
Continué luego por la nariz. Entre el puente y las cejas abrió un párpado y me miró. Aún no tenía ningún reflejo en el iris, pero los ojos brillaban al sol y percibí el ritmo levísimo de su respiración. También sacó la lengua, rozándola con la mía. Le adiviné unos dientes de roca y ámbar.
Seguí, lentamente, por los brazos y las piernas. Saboreaba la sal de su cuerpo, que lo cubría desde siempre. La sal de siglos, que se evaporaba, despacio, entre mis labios.
Sentí el bombeo de la sangre colmando las arterias. La piel ya era tersa y húmeda, resplandeciente en el ocaso.
Me sonrió agradecido.

Cuando hube acabado, quise abrazarlo.
No pude, ahora era yo otra estatua de sal.




Foto Virgi


Si también les apetece leerme en La Esfera Cultural, allí estoy, con La Trapecista.

71 comentarios:

Trini Reina dijo...

Creo que no fue un intercambio justo. Aún así el trayecto tuvo su aquel...

Nos haces estar allí a través de tu palabra. La sal casi nos cubre.
Besos

virgi dijo...

Es lo que tienen los intercambios, no siempre son equilibrados.
Gracias, Trini, besos también para ti.

alkerme dijo...

A mí sin embargo, sí me parece equilibrado y siempre un gusto leerte.

Saludos, Virgi

Isabel dijo...

Una imagen poderosa tanto en la foto como en las palabras.

Una de tu otro texto en la esfera se ha quedado en mi cabeza: volatinera, es muy sugerente.

Es un placer leerte.

Besos.

Myriam dijo...

mmm resultó un intercambio demasiado salado...

Myriam dijo...

ahhh Virgi, y te dejo un abrazo, nada salado.

María Socorro Luis dijo...

Muy original y simbólico.

Te admiro y te quiero.

Genín dijo...

Siempre lo he pensado, hay que tener mucho cuidado con lo que se abraza...
Besos y salud

mjromero dijo...

al final tiene un algo de misterioso.
La trapecista me ha gustado también.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Poderosa entrada, virgi. Cuánta entrega....Me has llevado con tu palabra hasta el mismo abrazo.

Cariño, cariño y cariño

Arantza G. dijo...

Sorprendente.
Un intercambio la mar de salado
Besos

virgi dijo...

La mar de salado, sí, Arantza. Conciso y simpático tu comentario. Beso lindo para ti.

Sarco Lange dijo...

A veces creo que yo también soy de sal. De una que cuesta que se derrita.

Bss.

Isabel Martínez Barquero dijo...

Me ha gustado mucho, porque a mí, también, siempre me cuentan historias las estatuas.
Un intercambio salado que funde materias y corazones.
Precioso, querida Virgi.

mar dijo...

Trapecista y estatua.
Arte y poesía.
Cautivadores ambos, Virgi.
Te aplaudo.
Te beso.

Elvira dijo...

Te salidificaste, vaya por Dios! :-)

Besos, escritora (yo también te aplaudo)

tanci dijo...

mmm/mmm me ha parecido un relato de más sensual. Hice el mismo recorrido y me llevó por todo el itinerario que tan certeramente ibas describiendo. Me retrotrajo a cuando éramos pequeños y al salir del mar chupábamos esas pequeñas gotitas que quedaban por nuestro cuerpo. Sensualidad y vuelta a los origenes ¿hay algo tan natural como saborear la sal? y al final ella se convierte en estatua de sal pero ¿se derretirían al unísono?. Bellísimo Virgi.¡Uhm! Besos muchos y abrazos también. Y ahota voy a danzar con el otro relato.

Tonet dijo...

Si es que das la mano y te arrancan la vida...desagradecidos...
Una delicia leerte Cielo :)

Besito y feliz finde Virgi.

Tonet

Larisa dijo...

Te me estás poniendo erótica, mi niña. Ay, ay, mi cuerpo pide salsa, como dice la canción.

O será que mi mente está muy sucia.

Aquí tienes una cesta de biquiños. Sin sal.

virgi dijo...

...salsa, salsa, mi cuerpo pide salsa...ja ja, Larisa eres única! Con lo que me gusta el baile.
Me cogí la cesta enterita y te la devuelvo llena de sonrisas.

Esilleviana dijo...

Es lo que tiene estar en contacto con el mar. Eres privilegiada, lo sabes verdad?
jaja y no solo por tener el mar a tus pies, sino por tu imaginación y sensibilidad.

un abrazo Virgi

iré a leerte a La Esfera cultural.

diego dijo...

Los vasos comunicantes: uno se vacía para que otro se llena. Poética y sensual.

La sonrisa de Hiperion dijo...

Intercambios para seguir viviendo...

Saludos y buen fin de semana.

mateosantamarta dijo...

Mirar atrás siempre te convierte en estatua de sal...basta mirar adelante para recuperar el pulso. Muy hermoso, Virgi. Voy a LA ESFERA CULTURAL.Un abrazo!

marichuy dijo...

Hermoso. Al final de la lectura sentí una extraña tensión, también un poco de sed.

Un beso, querido Virgi
[voy a leerte allá]

Tempus fugit dijo...

El sudor y las lágrimas nos liberan del exceso de sal que los labios y los ojos adquieren de otras marismas.



besos

virgi dijo...

¡Qué bonito, Gato!
Es que eres un sol, sí
Muchos besos

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Dar la vida, se llama. No siempre merece la pena...
Besos.

VICTOR VERGARA dijo...

Cuando posamos nuestra mirada en algo participamos de ese algo, quizá le comprendemos y somos un poco de ese algo. La escultura también posó su mirada en tí.
Lindo relato.

Bs.

edgar dijo...

Generosamente sensual y misterioso.
También me gustó La trapecista. Dentro de su tristeza de mariposa que cae, tiene una hermosa luz.
Abrazo

tecla dijo...

Qué bonito Virgi, a mí me gustaría poder hacer lo mismo. El problema es que la sal así a secas no me gusta y no se me ocurre qué podría hacer.
Pero lo pintas tan bien que aún así creo que lo intentaría.

Franziska dijo...

Parece que Eros se cruzó en el camino. Muy delicado.

Un abrazo. Franziska

virgi dijo...

Y querida Franziska, cuando se cruza, poco se puede hacer en su contra.
Un fuerte abrazo

alfonso dijo...


· Y con su lengua... tu cuerpo, luego el lóbulo, la nariz, etc. Hasta volver a ser él mismo.
El proceso fue tan placentero, que el ciclo todavía continua.

· Besos, salados

CR & LMA
________________________________
·

gaia07 dijo...

Inmortalidad o vida, eterno dilema en la que la reciprocidad no es justa. De momento solo nos está permitido elegir entre vivir a tope o crear una obra que nos inmortalice.
Creo que la elección sabía está en la que te proporcione mayor felicidad en la travesía.

Un beso

JOAQUIN DOLDAN dijo...

nada más contagioso

Dol dijo...

jejejeje
qué bueno.
Menudo subidón de tensión con tanta sal.
Pero el amor es así,salado o dulce o lo que toque.
Un beso,Virgi.

Cabopá dijo...

Vengo de La ESfera, allí he dejado mi granito de sal...

Me encanta la sal y tu relato que es de una sensualidad perfecta a pesar de convertirme en estatua, yo haría lo mismo...

Besicos, ya vuelvo a andar por aquí

edgar dijo...

Volví al circo.
Bello y triste.
Otro abrazo

Nómada planetario dijo...

Eso te pasa por ser tan resalada.
Buen relato.
Besos con toques de sal

. dijo...

A veces suele ocurrir que nos entregamos tanto a el/la otro que nos olvidamos de la propia existencia, que la sal no cubra tu mirada y aniquile tus sueños.
Un saludo.

fgiucich dijo...

Aqui dejo un terrón de azúcar a modo de compensación. Abrazos.

virgi dijo...

mmmnnn mmmnnn...me hacía falta, fgiucich, mil gracias, todo un detalle.
Muchos besos

Sergio DS dijo...

No se puede amar a Gulliver.

V dijo...

Excelente. Pero ¡ay pillina!,si me lo permites. Estamos, creo, ante una cadena infinita. Y a saber quien o quienes serán los que ahora se acerquen a ti, ya estatua y experimenten ese goce salado, ese sabor que atrapa como una maravillosa tela de araña hasta sucumbir en ella con placer.En este caso en ti y para liberarte de nuevo. Un saludo.

Rubén Lapuente Berriatúa dijo...

Prosa brillante y tema
original.Aciertas.
Unn beso

Anna Devert dijo...

He dejado una pequeña huella de sal en La Esfera.
Son restos que aún tenía adheridos en la mirada, después de saborear tus palabras.
Un abrazo.

Zayi Hernández dijo...

Valdrá la pena el sacrificio?
Ojalá que sí...pero cambiar para ser lo que otros quieren que seamos, aunque sea inconscientemente, casi nunca vale la pena.
Aún así, bellísimo texto, Virgi.
Un beso.

virgi dijo...

Si es por aprender cosas nuevas, tal vez valdría la pena, Zayi, pero poco más. Nunca saldrá bien entregarnos hasta perdernos a nosotros mismos.
Aunque una cosa es decirlo y otra, ser conscientes y no seguir adelante.
Gran gran beso

ARO dijo...

Perdona la broma y déjame que te diga que de lo que se cría. Un saludo.

virgi dijo...

Hasta en las bromas eres un caballero, apreciado Aro.
Una sonrisa y un beso

Isabel Barceló Chico dijo...

Maravilloso, virgi. Me preguntaba yo quién sería ese ser que se dejaba lamer tan dulcemente... Después de leerte, estoy segura de que pronto alguien recorrerá tu piel con la lengua y te devolerá a la vida. Voy a la esfera. Besazos.

virgi dijo...

Estoy en la dulce espera, querida Isabel, segura de que vendrá.
Abrazo grande.

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

La pasión es capaz de lograr lo imposible.
Bsobso

Anónimo dijo...

Fui a La trapecista, me encantó (sin comentarios), que lo sepas.

Anónimo dijo...

(¡ah, y me alegra verte en otros sitios, perdona por volver y volver)

I. Robledo dijo...

Bellisimo, amiga... Lamento, eso si, el final, que nos deja sobrecogidos...

Un abrazo fuerte

Verae dijo...

Me quedo tranquila; si es un intercambio ... volverás a cobrar vida.

BsoT.

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Por fin vuelvo, sí, por finnnnn.

Eso es lo que tiene dar vida, por eso lo que nos enseñaron a las mujeres no es del todo cierto. Lo damos todo y nos quedamos sin aliento para seguir adelante. No nos enseñaron que nosotras también tenemos una vida que cuidar y disfrutar.
Besicos muchos.

Esilleviana dijo...

Gracias por tu comentario. Me conformo con seguir aprendiendo de ti :))

un abrazo

Darío dijo...

Precioso...entregarse, quizá, para absorber el dolor del otro. Un abrazo.

virgi dijo...

Da que pensar tu apreciación, Joven. Real, aunque no nos guste.
Besos

mar dijo...

Entre el trapecio y la sal,no sabría con cuál quedarme.
Te cuento.
Bisous

silvia zappia dijo...

círculo eterno, la sal de los siglos.
círculo eterno, como la vida y el amor.

besos, maestra*

Beauséant dijo...

esto, más que con la poesía, va a tener algo que ver con la ósmosis, ¿no?

virgi dijo...

vaya vaya...si que tienen ocurrencias mis visitantes...

Sonrío, Beauséant, sonrío...

PSYCOMORO dijo...

Es el destino de quien devora el deseo hasta el final; tarde o temprano tienes que recordar quién solías ser. Precioso, Virgi. Un abrazo.

maria dijo...

La entrega nos lleva tan lejos que luego no encontramos el camino de regreso.
Hermoso, Virgi, mucho.

Tesa Medina dijo...

Mira que me gusta la escultura, pero no se me había ocurrido un acercamiento tan sexy, qué idea.

Y además has comprobado que no hay piedra que se resista a tus encantos.

Me gusta, Virgi, muy original.

virgi dijo...

Me ha gustado mucho que vinieras hasta aquí, querida Tesa. Me has dado una sorpresa genial y valoro mucho tus opiniones.
Otro abrazo