martes, 10 de noviembre de 2009

La señal




Dejé una marca para ti.
Teníamos un código ¿acaso no lo recuerdas?
Recorrí el zaguán una y otra vez,
ahora veo que confié inútilmente.

Permanece aún la misma puerta.
Las cadenas no me permiten entrar.
No.
Y tampoco querría, prefiero estar fuera.

Incluso el señuelo que te abría el camino,
muestra la esperanza de que me sonrieras.

Se pierde la huella, el tiempo desgasta los matices que me hacían amarte.
Cuando caiga el trozo de tela, no volveré a mirar esa puerta.

63 comentarios:

marichuy dijo...

Querida Virgi

Romántico y misterioso. Pero sin olvidar que, por muchos código secretos y promesas hechas, hay enamorados que se olvidan de las citas y las claves de (o quizá tienen miedo y por eso se encierran).

Un beso

mariajesusparadela dijo...

No importa que la tela desaparezca, incluso puede desaparecer la puerta...un día, sin saber por qué, volverá el recuerdo.

Anónimo dijo...

Enigmatico, aunque pienso que las claves no se olvidan, solo se guardan lejos del recuerdo.

Las cadenas no permiten entrar, dices,
aunque tampoco querria, perfiero estar fuera.

A veces, se recuerda, con aceptacion del fracaso, con la ilusion de lo vivido, con la esperanza de lo que fue, y no sera.

Precioso poema, y foto, y tajante final, " no volvere a mirar esa puerta"

Que razon tienes amiga , cuando dices que el tiempo desgasta los matices.

Roberto dijo...

me ha calado hasta el alma este poema. Sobre todo en ese malísimo momento de mi vida. Gracias por el texto en estas horas malas.


: )


R

sus(ana) dijo...

hay señales que permanecen por siempre, simplemente esperando

saludos

Meri Pas Blanquer (Carmen Pascual) dijo...

El tiempo... testigo hasta del desamor. Lo que un día prometimos con tanto fervor, pasado el tiempo se vuelve del revés. Nos aniquila hasta la pasión más desbordante.
También nos cura, como tu poema hoy, que me dejó un sabor nostálgico, agridulce.. pero tan hermosooooo.

Gracias querida amiga.

TORO SALVAJE dijo...

Que sensación esa...
Dejar la marca y sufrir como pasa el tiempo sin obtener respuesta.
La espera improductiva.
Muy bueno.

Besos.

ybris dijo...

Formidable, Virgi.
Las marcas se van borrando cuando no hay respuesta de sonrisas ni signo de acogida.
¿A qué entrar?

Besos.

Trini Reina dijo...

He conocido a gente que han olvidado instantáneamente los códigos y las marcas y hasta las heridas que causaron.

Muy bello el poema y me gustó la imagen. Da una sensación de ausencia que impone.

Besos

Fernando García Pañeda dijo...

Quizá fuera mejor arrancar el trozo de tela y caminar de nuevo hacia otro destino, otras puertas. El tiempo que se pierde en las esperas nunca regresa; el amor, cambia y se adapta como un niño que nunca deja de crecer y aprender.
Un beso.

LA ZARZAMORA dijo...

Los códigos cambian y
los recuerdos se entorpecen.
Dejamos huellas por los zaguanes que recorrimos una y otra vez.
Y el tiempo borra las huellas,
las deja fuera del camino.
El trozo de tela, tal vez nunca caiga y sea la señal que permita de nuevo recordar que quizá mañana ya no se desee estar fuera y se miren aquellos matices de manera diferente, con cierta dulzura y nostalgia.

Besos, mi querida Virgi.

alicia dijo...

Ya la puerta no es la misma, ni siquiera la tela lo es... La lluvia y la lija pertinaz de las estaciones borraron los significados hasta reducirlos a harapos descoloridos. Habrá que reunir esperanzas y caminar, de nuevo ligeros, por una nueva calle sin nombre
(Precioso poema, virgi...)

Manuel dijo...

Un lenguaje hermético que sólo los amantes pueden descifrar...son las que abren las puertas de sus corazones...

fgiucich dijo...

Cuando el amor termina no hay códigos qu valgan. Hermoso poema. Abrazos.

iliamehoy dijo...

Esas cadenas ahogan, incluso la confianza; pero de tus palabras asoman eslabones de esperanza.
Una sonrisa

June dijo...

Lo que más duele es que se molesta una en crear un código y al otro se le olvida interpretarlo, verdad ??

Me gustó mucho.
Un beso.

Franziska dijo...

Para largo fías esa indiferencia porque es mucho tiempo lo que puede resistir esa señal deteriorándose hasta que se agote. Perdona la broma. Creo que entiendo la intención del texto y pienso que cuando alguien pierde su tiempo en dar explicaciones a otro es porque, en el fondo, todavía nos importa ese alguien a quien nos dirigimos.

Saludos cordiales

Roberto dijo...

Sin embargo, ese código es en realidad algo de ambos. Sucede que alguien lo rompe...a saber qué.

A mí me acaba de suceder lo mismo y trato de sonreír cada día; de sentirme bien. Era una mujer a la que amé verdaderamente. Me siento abatido, de veras.

Saludos,


R

rosa dijo...

Me gusta el final, cuando dice que no volverá a mirar esa puerta, es rotundo...
Saludos
Rosa.-

gaia07 dijo...

El tiempo puede con todo, huellas, confianzas, señuelos y esperanzas. Tiene ese poder aún cuando nadie olvide.
Un beso.

Roberto dijo...

Es cierto lo del tiempo, y habría que agregar que además de todo lo que se dice, el tiempo es una puta mierda porque lo primero con lo que acaba es con nosotros mismos.

El amor, o eso a lo que uno le apuesta, donde pones sexo, sudor y semen y risas y lágrimas y proyectos y mil cosas más, es lo único que vale la pena de esta vida. El tiempo? ese camino patético por el que andamos, no vale la pena para ponerle esperanza alguna de que acomode nada.

Amar y follar! Que vivan las mujeres y que mueran los maridos!


R

Filoabpuerto dijo...

Si la huella no ha sido interpretada, si no ha habido un tú que la acoja, lo mejor es seguir el camino.

Esa puerta, tremenda imagen, Virgi, parece ahora menos desvencijada al haber escrito tú para ella.

Un abrazo

Merce

víctor (el gato estepario) dijo...

Me han gustado mucho todas las interpretaciones y reflexiones que se han dicho. Suelo leer siempre todos los comentarios de otros blogs, porque son una fuente de enriquecimiento.
Especialmente me ha llamado la atención la reflexión de FRANZISKA:
"pienso que cuando alguien pierde su tiempo en dar explicaciones a otro es porque, en el fondo, todavía nos importa ese alguien a quien nos dirigimos."
Quizá sólo se trate ya de un simple rescoldo, pero con la más leve brisa puede inflamarse de nuevo.

Me gusta la palabra -zaguán-. Es la antesala de la vivienda. Y lo usas como lugar de inicio, lugar del primer/os intercambio/s. El lugar de las marcas, las señales, las huellas, en una palabra LO ESPERANZADOR, el punto de partida. Abortar la esperanza en la misma salida es frustrante. Pero en cualquier lugar del trayecto, duele.

"Y tampoco querría, prefiero estar fuera." Este verso es toda una incógnita íntima y personal, pero quizá denota MIEDO a encontrar lo que no se desea. Y en todo caso, siempre es mejor salir de dudas, si no esa duda puede devorarnos en el futuro.

"Cuando caiga el trozo de tela, no volveré a mirar esa puerta." El trozo de tela lo interpreto como el tiempo prudentemente estimado para la oportunidad, para cerciorarse.

Tampoco sabemos nunca de las razones profundas de la otra persona. Quizá miedos también.

De todas formas, pienso, que todo lo que nos sucede, nos favorece, aunque sólo nos demos cuenta con el paso del tiempo. Valorar aquello que tuvimos la oportunidad de vivir, como un pequeño tesoro, y pasar a las siguientes experiencias que nos esperan, con sus destellantes reflejos dorados.

Y faltaría más, es un poema precioso.

UN BESO, DESDE LA TABERNA DEL CRÁPULA.

 Mayte dijo...

Siempre la memoria traiciona hasta la negativa más templada...hermosa composición para una imagen fascinante.

Bikiños Vir.

Lu dijo...

Me gusta esa puerta Virgi. Sus misterios. Sus grietas en la madera. Su señuelo plantado y tu historia.
Besos.

àngelpvico dijo...

Ella no conocía la maldición hasta que el último velo estuba a punto de caer … sus caderas se movían al ritmo de la música y fue al abrir sus muslos cuando la piel se hizo leña y sus secretos quedaron cerrados para siempre.

ZenyZero dijo...

Puede que haya un lugar lleno de retales gastados. Y otro lleno de ojos que esperan. Y puede que algún día se encuenten. Cuando la Tierra no guarde fuego en sus abismos.

Un abrazo
Chuff!!

virgi dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
virgi dijo...

Cuando nos olvidamos de una cita ( y más si de un amor posible) es que la cosa está grave...bueno, o que nunca existió.
Besitos, Marichuy

Sí, los recuerdos nada tienen que ver con los objetos. Permanecen en nosotros, marcados a fuego. Mariajesus, un abrazo grande

Hola Calipso! Muchas veces esas claves las reservamos para entender situaciones futuras, no crees? Besos

Gracias Roberto por tus reflexiones. Me alegra si te ha servido de algo. Un abrazo a tu visita.

Y esas señales nos acompañarán siempre, con más fuerza o con menos. AnaSaénz, sonrío ante tu lúcida concisión.

virgi dijo...

Hola Carmen ¿sabes que me encanta esa nueva imagen que te veo?
Gracias por visitarme siempre, con lo ocupada que debes estar, solamente en preparar esos maravillosos posts!
Besos, artista

Creo Toro, que la vida tiene más de espera improductiva que de otra cosa. Así que te mando besos y sonrisas...¡para animarnos!

Ybris, muy estimado siempre. Cuando llego hasta ti, me sereno, sí...y me digo: ¡Qué capacidad!
Gracias, siempre vas más allá.
También besos

La puerta me sedujo cuando la vi. Tenía la piel de las ausencias.
Y me dió pie a estas letras. Trini, un abrazo

Tendríamos que tener lucidez para esperar sólo lo que sabemos que volverá. El resto, dejarlo y caminar siempre adelante.
Fernando, te mando un trozo de tela como un arco iris. Así tus piratillas tal vez jueguen con él.

Miguel Baquero dijo...

Es precioso como de una foto, seguramente tomada casi al azar (¿me equivoco?) saes extraer poesía.

virgi dijo...

Súper Eva, ¡qué tierno y esperanzador tu comentario! gracias, tesoro.
Tienes razón, muchas veces lo que en un momento nos parece duro y terrible, con el paso del tiempo se ve como necesario para haber seguido.
Tal vez la tela sea un signo de la fortaleza de nuestra vida.
Besos y guiños

virgi dijo...

"caminar ligeros"... me ha gustado esa posibilidad..."calles nuevas"...
sí, sí
Estamos en ello, mil besos, Alicia

El lenguaje de los que se aman es intransferible. Ellos saben de sus códigos, huellas, capítulos, índice...
Manuel, gracias por venir


Hola Fgiucich! el amor se va y no hay nada que lo solucione. Por más que esperemos en el zaguán de la vida. Besitos

Pues antes que nada, Ilia, también sonrisas para ti. Un placer leerte aquí y en tu rincón. Que la esperanza nos mantenga, muak!

Ja, ja, ja! muy bueno June. Cuando ya no se interpretan los códigos de la misma forma...¡uf! mejor salir volando...Sonrisas a tu sentido del humor

virgi dijo...

Franziska, la experiencia es un grado. Así tu comentario es muy sagaz. Besos, me gustan tus visitas.

Roberto, gracias por volver y volver. Verás que te esperan otros códigos. Un beso.

Me alegra que te haya gustado, Rosa.
Lo de rotundo es en el papel, la realidad luego nos lleva por otros derroteros. Besos y ternura.

El tiempo anulará la tela, las cadenas, la puerta. Viviremos de pequeños retazos y del presente que nos compense. Un abrazo, querida Gaia

¡Vaya, qué lindo! Si te parece que mis palabras la restauraron un poco, me alegra. Gracias Merce/Filo, también colores y alegrías te envío.

virgi dijo...

Pacokafka, ¡que dedicación le pones a los comentarios! me alucina, la verdad.
"pienso, que todo lo que nos sucede, nos favorece, aunque sólo nos demos cuenta con el paso del tiempo"...tal cual lo pienso yo también. Lo que nos sucede es por alguna razón que entenderemos más adelante, porque somos tan cortos de vista que no podemos reconocer las experiencias como positivas, en el momento que nos ocurren.
Un abrazo grande, grande.

virgi dijo...

Mayte, me asomo a la puerta, sonrío y te mando montón de bikiños.
(gracias por lo de "fascinante")

Una alegría, Lu, cuando apareces por aquí. Otra alegría que te haya gustado. Besos de océano.

Tan original, Ángel, y tan escaso! paso con frecuencia, esperando tengas nuevas reflexiones...
Bueno, sigo en ello, muak!

¡Largo me lo fiáis, Don Zeny!Todo sea por creer en algo, aunque ya no queden ni puertas, ni maderas, tal vez ni árboles...¡uy, me ha entrado el pesimismo!
Bueno, mejor, besos y sonrisas

Miguel, la foto la hice paseando por Atenas en julio, igual que otras que ya colgué aquí.
Yo escribo casi siempre a partir de imágenes, me resulta fácil y sugerente. Un placer que te haya gustado, gracias, tesoro de chico.

alfonso dijo...

• con la mirada atenta…

El tiempo borra las marcas, el tiempo borra la memoria...
un aire húmedo se lleva una tela...
Aún así, no olvides la puerta. Está ahí, como la muralla de Lugo, para franquearla.

• saludos
____________________________
CR & LMA

Ventana indiscreta dijo...

Más apropiado que ´La señal' como título hubiera sido 'Jirón'.
Jirones de vidas es lo que inventamos.

Besos.

edgar dijo...

Cuando veo una puerta así, me da un algo de tristeza.
Entiendo tus palabras. Pero también extrañarás ese trozo de tela.
Me ha gustado la foto, aún con su penar.

Roberto dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
La sonrisa de Hiperion dijo...

Dejenme una marca que me guía. No mirare la ruina de mi cuerpo, ni menos el vuestro. Sólo guíenme...

Saludos y un abrazo.

Carmen dijo...

ni usando el mismo código parece que la comunicación llegue a ser buena

a esa puerta yo la dejaba bajo 7 llaves

La frase final tan contuntende me ha encantado

Buenas noches

manolotel dijo...

Como poema creo que es demasiado directo y va sin concesiones al hecho mismo de la experiencia (sea propia o imaginada).

Como reflexión, Virgi, no está mal tampoco, pero la cuestión es: ¿que habrá tras de la puerta? (como decía una vieja canción, aunque en aquel caso la puerta era verde). Puede que ya solo quede vacío y soledad. Puede que solo rencor. Puede que los restos del amor no puedan contrarrestar esas otras sensaciones. Esperar no está mal pero mientras tanto se pueden hacer otras cosas. Vivir, por ejemplo. O escribir, claro.

Un beso.

Merce dijo...

"Se pierde la huella, el tiempo desgasta los matices que me hacían amarte"

:)

un desgaste de matices... no sabria definirlo mejor.

Me quedo con esa frase grabada.

Biquiños.

Mediterráneo dijo...

Un texto lleno de señales.
Cuando aún quedan caminos por recorrer, otros hay que olvidarlos con valentía.

Gracias por tu visita.

Besos desde mi puerto.

EL BLOG DEL COLEGIO GUAYONGE dijo...

Qué manera tan bonita de relatar una experiencia de amor/desamor y olvido. A veces amamos a quien no merece nuestro amor o creemos que no lo merece. Y lo de que el tiempo desgasta los matices que me hicieron amarte...me encantó!!!!!!....qué difícil oxigenar una relación de muchos años... ¿no?.
¡a juzgar por los comentarios...qué exitote!!!
Un abrazo enorme, me encantó verte. Saludos.

Marien dijo...

El tiempo hace que las cosas que nos importan pierdan a veces valor, o somos nosotros los que cambiamos nuestros valores. Ayer amabamos y hoy, ¿quién sabe?
Me gusta mucho leerte, tan pausada y tan acertada.
Besos

Pilar dijo...

A veces pasa mucho tiempo hasta que cae ese trozo de tela que amarramos un día a esa puerta que nos parecía única..., pero siempre es posible volver a atar con ilusión renovada otras señales a nuevas puertas...
:)

un abrazo muy fuerte

virgi dijo...

Querido Ñoco, ahora franqueo otras puertas, sin señales, sin marcas, sin códigos.
Pero me gustó esa puerta griega, me sedujo la posibilidad de que tuviera muchas historias. Una de ellas fue ésta.
Montón de besos y un charco de agua salada para ti.

A jirones vamos por la vida. Jirones de piel, huesos, alma, vamos dejando.
Sofía, te hago señas con un pañuelo desde aquí, estoy sonriendo y te mando besos.

Hola Edgar! sí, en muchas ocasiones, las cosas que queremos olvidar se vuelven, con el paso del tiempo, en las más añoradas. Un abrazo a tu sabiduría.

Muy lindo lo que me has escrito, Hiperión. Entre todas las marcas que vamos viendo, parece que lograremos encontrar la senda. Besos

virgi dijo...

Cordelia, a veces los códigos lo que hacen es liarnos más. Dejemos que las cosas sucedan...
(fácil decirlo, no?)
Besos

Gracias Manolotel por venir. La experiencia es imaginada. Yo escribo estas cosillas del blog casi siempre en base a una imagen que me seduce. Y la puerta me decía un montón. Un abrazo, viviendo, escribiendo, leyendo...

Te quedas con los matices, Merce, por esa capacidad súper que tienes y que nos transmites con tus fotos.
Besos y colores

Valor para cerrar o abrir puertas, subir montañas o bajar a los infiernos personales.
Valor.
¡Cuán necesario! Mediterráneo, que llegue a tu puerto una gaviota cargada de sonrisas.

virgi dijo...

¡Coleguay! ¡Qué genial verte aquí y allí! me alegra que te guste. Tú sí que eres un sol lleno de luz. Montón de besos, gracias por venir.

Querida Marien, espero que haya ido todo súper y estés contenta del libro de relatos. Ahora mismo voy a ver si tienes algo nuevo, porque he pasado varias veces y no.
Besos, siempre gracias a tus visitas entusiastas.

¡Ah, Kat! Me encanta que vengas. Tienes razón, hay muchas puertas, muchas ventanas, muchas posibilidades. El asunto es estar en disposición de abrirlas, paladearlas. Besos, linda

Zayi Hernández dijo...

Nunca he sido de hacer muchas promesas y las que hago, suelo cumplirlas...Nunca he prometido "no mirar a alguien" y sabes por qué??? porque termino mirando y mirando y mirando...soy terca para las cosas del corazón y con los años, desgraciadamente, me he vuelto más realista y sé que el olvido no se promete, ni se obliga...sólo llega cuando le toca la hora de llegar...
Besitos linda.

Isabel Mercadé dijo...

Oh, Virgi, es una maravilla la interpretación que le das. Esas señales que se dejan a veces, esperando un milagro y ese enigmático final, que deja en suspenso, sospechando que, tal vez, no caiga nunca.
Es un poema redondo, impecable, precioso.
Un abrazo.

mjromero dijo...

Puede haber caminos perdidos, olvidados...

Camille Stein dijo...

cuando se desprenda la tela
ese invisible trozo de alma
deshará su cadena
desaparecerá
en las líneas
gastadas
de un olvido
... y volverá
a tejer
despacio
un nuevo
recuerdo



... un beso, Virgi

white dijo...

ni siquiera esperes a que caiga la tela, no vuelvas el rostro, delante está el todo. Besitos

virgi dijo...

Querida Zayi, tu vitalidad se desprende de tus comentarios y tus blogs...¡sigue así! un placer.
Besos, preciosa
(yo también soy tozuda, será que soy capri...)...más besos.

¡Vaya, Bel! ese entusiasmo me entusiasma...sí, sí...así mismo.
Montón de sonrisas, gracias por tus enseñanzas. Te abrazo también

Los caminos perdidos es que tuvieron que perderse. Así que mejor seguir adelante y olvidarnos de sendas pasadas. Alfaro, un beso,
muak!

Precioso, Camille.
Apenas dejamos un recuerdo, ya estamos tejiendo otros nuevos.
Un abrazo, gracias

No sé, White. Es un buen consejo, vital y lúcido, pero los humanos somos poco razonables. ¡Cuántas veces nos empecinamos en cosas absurdas y sin futuro!
Besos te van volando

PÁJARO DE CHINA dijo...

El pedazo de tela anudado a las cadenas es un intento de quebrar el sello que le han puesto a las puertas. De decir: "ábranse, ábranse para mí, que aquí me quedaré hasta deshacerme".

Esto lo dice la tela, pero no quien la colgó allí. Porque la tela es un señuelo, un código secreto, con un reloj incorporado. Es el plazo que uno se ha puesto para no volver a mirar la puerta.

Cuando la tela se deshaga y caiga, la historia de la que fue coda comenzará a ser recuerdo. Los ojos mirarán hacia adelante y los pies avanzarán en otra dirección, bifurcada.

Precioso. Voy leyéndote y aprendo a reconocerte: "sí, esto es virgi".

Un abrazo fuerte.

P.S.: Berlín es uno de mis recurrentes estados mentales, Cuando la piso y cuando la pienso. Cuando la sueño, también.

virgi dijo...

Un lujo, querido Pájaro de China, que cierres mi "Señal" con tus palabras, sabias y poéticas.
Mis gracias.
Y más.

En cuanto a Berlín, no me cansaré de visitarla, siempre nueva, siempre sangrante, siempre herida, siempre renovada.
Pues ahora, besos y besos

Clarice Baricco dijo...

Ayy me dolió.


Abrazos.

virgi dijo...

Siempre duele, sí. Pero tal como está al señal, seguramente ya hace tiempo que el dolor es pequeño.
Un abrazo, Clarice.

Ángel Muñoz dijo...

ME GUSTAN TUS FOTOS, DE VERDAD.

virgi dijo...

¡Vaya, qué linda sorpresa encontrarte también aquí!
Muchas gracias por este recorrido, Ángel, besos besos