Un lujo es lo que eres, Genín, siempre tan complaciente y de buen humor. Un fuerte y agradecido abrazo. ¡Ah, yo también me quedo con el pintado a mano!
Esa mirada del niño de abajo y tus números me hace pensar en el tiempo que necesita tu mirada atrapando instantes preciosos y la del pintor captando esa esencia tan difícil de plasmar. Puro arte. Abrazo admirado.
Isabel, tesoro, sí que tienes empatía que inviertes tiempo en lo que me has escrito. Eso dice mucho, pero mucho de ti. En fin, que eres un lujo, GRACIAS. Abrazo enorme para ti.
Exacto, Beauséant, lo has dicho en pocas palabras y con lucidez. En realidad...¿son las salidas verdaderas salidas o sólo lo que nosotros queremos que sean? Besos y besos. Y una sonrisa.
El tesón es una virtud, desde mi punto de vista, con él se puede ir a todas partes y se suele encontrar cualquier tipo de salida. También podríamos aplicarlo a la política, aunque aquí la salida es más difícil de encontrar:). Una estupenda concatenación de números, imágenes y texto. Besos p.d. Oye, me encantó tu crítica personal de la obra pictórica El Chico de la Gallina, te felicito.
Más bien, querida Marichuy (¡linda sopresa!), digamos que las salidas son tan difíciles de encontrar, que nos pasamos media vida intentándolo. Abrazos, besos y siempre bienvenida.
Las salidas de nuestros políticos ya sabemos por dónde van, por no hablar de sus puertas giratorias, que deben ser una de sus preocupaciones básicas, querida Ginebra. Me reconforta que te haya gustado lo del niño, algo tenía que hacer yo con esa mirada. Besos y besos. Y gracias.
Es que abrir una puerta, ya es un esfuerzo añadido, querida Franzis Y en este caso, parece que el horizonte es apetecible. Por cierto, he ido varias veces a tu blog y no lo veo actualizado, lo intentaré ahora mismo. Besos, besos y besos
Hace mucho que no te visitaba, acabo de verte en el blog de Ildefonso y aquí estoy si me lo permites. Números y puertas... siempre me han gustado las puertas y tengo muchas fotografiadas, en cambio nunca me habían llamado la atención los números. Me fijaré en ellos. Un abrazo!
¡Claro que te lo permito, U-topía! Por favor, si es un placer, también yo recuerdo visitarte, pero luego pasé un largo tiempo sin colgar nada ni transitar este mundo; hace un par de meses o así, he vuelto, pero la verdad sin mucha continuidad. Un fuerte abrazo.
Los números cautivadores, las imágenes belleza una detrás de otra, y tú haciendo poesía unida al paisaje, buscando siempre una salida.Sé que hace tiempo que la has encontrado.Mi abrazo.
Los números cautivadores, las imágenes belleza una detrás de otra, y tú haciendo poesía unida al paisaje, buscando siempre una salida.Sé que hace tiempo que la has encontrado.Mi abrazo.
Lo que tienen las salidas, querida Tanci, es que cuando nos creemos que ya estamos fuera, aún nos quedan otras muchas puertas que cruzar. Y así nos va, en un ejercicio interminable.
Así te veo yo, poco más que un adolescente, mi niño, pero no tanto como con diecisiete, eh? tampoco te pases, caramba! Un guiño y gracias por este recorrido que has hecho.
Me encantan todas las fotos, me quedo con los números pintados a mano... :)
ResponderBorrarBesos y salud
Un lujo es lo que eres, Genín, siempre tan complaciente y de buen humor.
ResponderBorrarUn fuerte y agradecido abrazo.
¡Ah, yo también me quedo con el pintado a mano!
Esa mirada del niño de abajo y tus números me hace pensar en el tiempo que necesita tu mirada atrapando instantes preciosos y la del pintor captando esa esencia tan difícil de plasmar. Puro arte.
ResponderBorrarAbrazo admirado.
a veces una salida es cualquier cosa que uno quiera creer que es una salida ;)
ResponderBorrarIsabel, tesoro, sí que tienes empatía que inviertes tiempo en lo que me has escrito. Eso dice mucho, pero mucho de ti.
ResponderBorrarEn fin, que eres un lujo, GRACIAS.
Abrazo enorme para ti.
Exacto, Beauséant, lo has dicho en pocas palabras y con lucidez.
ResponderBorrarEn realidad...¿son las salidas verdaderas salidas o sólo lo que nosotros queremos que sean?
Besos y besos. Y una sonrisa.
La salida s importante encontrarla, y si no está, se inventa.
ResponderBorrarUn abrazo querida Virgi.
ResponderBorrarNada tan meritorio como encontrar arte, belleza, poesía en las cosas humildes, sencillas, pequeñas...
Mi cariño, Virgi. Siempre.
No lo tengo claro, Virgi, pero cuando tienes un martillo entre las manos cualquier problema te parece un clavo :)
ResponderBorrarAsí que sí, creo que sí
Bien por ti, querida Vorgi. No todos son (somos) capaces de hallar la salida cuando las cosas se ponen confusas.
ResponderBorrarUn abrazo grande
El tesón es una virtud, desde mi punto de vista, con él se puede ir a todas partes y se suele encontrar cualquier tipo de salida.
ResponderBorrarTambién podríamos aplicarlo a la política, aunque aquí la salida es más difícil de encontrar:).
Una estupenda concatenación de números, imágenes y texto.
Besos
p.d. Oye, me encantó tu crítica personal de la obra pictórica El Chico de la Gallina, te felicito.
Otro bello poema visual, en el que las imagenes y las palabras se integran felizmente
ResponderBorrarUn abrazo, amiga
Muy bueno, Virgi y gracias a Dios la salida no tenía puerta. Buenas y contundes fotos. Un abrazo.
ResponderBorrarAsí se habla, Reyes, aunque nos devanemos los sesos, tenemos que encontrarla.
ResponderBorrarBesitos, linda, besitos a repartir
Tienes razón, Soco, este tipo de cosas cautivan mi mirada y me hacen pensar mucho. Un abrazo a tu empatía, mi niña.
ResponderBorrarY lo peor es que cuando el clavo está ardiendo, ya no nos queda otro remedio que agarrarnos a él, Beauséant.
ResponderBorrarGracias por tu vuelta, besos y besos
Más bien, querida Marichuy (¡linda sopresa!), digamos que las salidas son tan difíciles de encontrar, que nos pasamos media vida intentándolo.
ResponderBorrarAbrazos, besos y siempre bienvenida.
Las salidas de nuestros políticos ya sabemos por dónde van, por no hablar de sus puertas giratorias, que deben ser una de sus preocupaciones básicas, querida Ginebra.
ResponderBorrarMe reconforta que te haya gustado lo del niño, algo tenía que hacer yo con esa mirada.
Besos y besos. Y gracias.
Ildefonso, un caballero siempre. Una satisfacción que te guste.
ResponderBorrarTe abrazo con agradecimiento y sonrisa amplia.
Es que abrir una puerta, ya es un esfuerzo añadido, querida Franzis Y en este caso, parece que el horizonte es apetecible.
ResponderBorrarPor cierto, he ido varias veces a tu blog y no lo veo actualizado, lo intentaré ahora mismo.
Besos, besos y besos
Hace mucho que no te visitaba, acabo de verte en el blog de Ildefonso y aquí estoy si me lo permites.
ResponderBorrarNúmeros y puertas... siempre me han gustado las puertas y tengo muchas fotografiadas, en cambio nunca me habían llamado la atención los números. Me fijaré en ellos.
Un abrazo!
Pues me alegro. Besos.
ResponderBorrarLos números solo te confundían...risas
ResponderBorrar¡Claro que te lo permito, U-topía! Por favor, si es un placer, también yo recuerdo visitarte, pero luego pasé un largo tiempo sin colgar nada ni transitar este mundo; hace un par de meses o así, he vuelto, pero la verdad sin mucha continuidad.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo.
Y yo de que vengas, Amapola Azul, besos.
ResponderBorrarPues sí, Alí. Pero también me cautivan y me encanta hacer juegos con ellos.
ResponderBorrarUn besote y gracias por el buen humor.
Los números cautivadores, las imágenes belleza una detrás de otra, y tú haciendo poesía unida al paisaje, buscando siempre una salida.Sé que hace tiempo que la has encontrado.Mi abrazo.
ResponderBorrarLos números cautivadores, las imágenes belleza una detrás de otra, y tú haciendo poesía unida al paisaje, buscando siempre una salida.Sé que hace tiempo que la has encontrado.Mi abrazo.
ResponderBorrarLo que tienen las salidas, querida Tanci, es que cuando nos creemos que ya estamos fuera, aún nos quedan otras muchas puertas que cruzar. Y así nos va, en un ejercicio interminable.
ResponderBorrarBesos dobles a tu visita doble.
ResponderBorrarAl mar no se le puede poner puertas...
ResponderBorrarY los números siempre llevan al infinito.
;)
Besos, tesoro.
Siempre quedan salidas. Preciosas fotos, también me quedo con el número pintado a mano.
ResponderBorrarUn beso.
La perseverancia tiene su premio
ResponderBorrary el optimismo también :-)
Besos
Ni puertas ni nada parecido. El mar es...¿qué decirte, que no sepas, mi niña querida?
ResponderBorrarTe abrazo con sal y sol, Eva, cielo.
Un placer que hayas hecho este recorrido, Sara, miles de gracias.
ResponderBorrarAbrazo bien gordo.
Dos buenas cualidades, Myriam, que no sé, no sé, pero creo que tú las debes de poseer en alta gama, eh?
ResponderBorrarMás besos, más.
:-)
ResponderBorrarY Gracias, Virgi por todos tus regalitos
en casa.
Besotes
Las gracias serán las mías, Myriam, por ser como eres.
ResponderBorrarBesos y cariños.
¡Qué buenas fotos e hilo conductor!
ResponderBorrarMe alegras, campeón!!! Ximens, un fuerte abrazo.
ResponderBorrarTu manera de mirar, Virgi, hace que cualquier pequeño detalle que encuadras sea un poema.
ResponderBorrarDisfrute visual y reflexión en pocos clics.
Muchos besos,
Tesa, Tesa, eres total y única.
ResponderBorrarMil gracias por tu empatía continua, besos y cariño a raudales.
No está el diecisiete. De todos modos, has acertado, sin saber que era el mío... y me has encontrado.
Es lo que tiene el camino, que todos se juntan.
Un beso
· LMA · & · CR ·
Así te veo yo, poco más que un adolescente, mi niño, pero no tanto como con diecisiete, eh? tampoco te pases, caramba!
ResponderBorrarUn guiño y gracias por este recorrido que has hecho.