Siempre me han fascinado los azules intensos en los cielos, con lo cual esas dos fotografías primeras me han hechizado, Virgi. Cuánta hermosura hay siempre en tu blog. Un beso, preciosa.
La obra y la arquitectura de lo humano no sólo se levantan desde la tierra sino que también pretende enganchar el cielo, como las ramas al lado de las grietas por donde se filtra el azul en humedad y agua. Así es el arte siempre atento a las estrategias de la vida!!! Besos Artista!!!
Buena pregunta, Juan, depende del día, la hora, el tiempo, el cielo, la época, la cámara, el ojo, el viento...y muchas más variables que tú sabes mejor que yo, ji ji...
Haces honor al nombre de tu blog. Poética pura. Si las fotografías son fantásticas, le doy más valor a las palabras que las engarzan, de oro, como tus ocres. Besos profundamente admirados, Virgi.
Isolda, millones de gracias. Es muy gratificante tu visita, mucho, tan expresiva como sueles. También montón de besos. Si te gustan, pues ocres y azules. :) :) :)
Por cierto, Sole, que en el Hierro hay unos tremendos lagartos que seguro proceden del que, según la leyenda, cuidaba las manzanas de oro en una de los trabajos de Hércules. Besitso, linda chica.
Precioso relato el de las cicatrices, Virgi. El peluche se salvó de ellas, me alegro por él; porque los humanos acumulamos muchas durante nuestro periplo vital, a veces demasiadas para que no se noten. Un beso
Dolorosas... siempre el dolor nos acompaña. Inevitablemente. Buena serie fotográfica. Cuida las horizontales y las verticales, para que no te crucifiques...
¡Ños, Ñoco, no se te escapa ni una! Ya me he dado cuenta que me pasa muchas veces, debe ser que al apretar el ¡clik! se me descompensa la horiz/vert. Besitos, agradezco todas tus anotaciones, sé que lo sabes.
Ojalá pudiera ir hasta esos azules y traerte conmigo un rato, querida Tecla. Lo intento, no creas, lo intento. Todo llegará, cosas más difíciles han sucedido. Un beso, un abrazo.
Azul profundo y sereno...pero algo no cuadra. Parece una inversión desde la felicidad y la plenitud hasta el dolor y el retaimiento. Un abrazo, amiga. Hermoso, pero duele.
Con tu mirada tan personal y poética, querido Mateo, le das una vuelta de tuerca que me sorprende y me encanta. ¿Cómo no gustarme que vengas? Un abrazo bien enorme.
Mucho azul, mucho azul, pero yo me quedo con esos ocres, algo tristes, pero reales y como de paleta. Y si hay que enredarse en esas ramas, voy contigo. Besotes
¡Ay, Dory Per, si yo supiera! habrá que ponerle un detective de los buenos...otra cosa no se me ocurre...bueno, haré un par de investigaciones y te digo si saco algo en claro. Sorry sorry sorry.
BEAUSÉANT, QUE SEPAS QUE HE INTENTADO PONERTE COMENTARIO VARIAS VECES, PERO EL MALDITO CÓDIGO DE "QUE NO ERES UN ROBOT" NO ME LO PERMITE. LO SIENTO PERO MUCHÍSIMO.
Si, entre el deslizarse, el colgarse y el balanceo...yo prefiero acurrucarme en la mecedora de la abuela y dejarme llevar por su confortabilidad. Aunque haya practicado todas las acciones, acurrucarme hace que desaparezcan las cicatrices. Este azul es muy intenso. Un beso, Virgi.
Azules por donde trepar, escalando y trepando entre ramas, imágenes, y un instante poético. Las grietas, sólo para esconderse, para penetrar en los orígenes de la tierra. Besos, tesoro.
Ese azul intenso da ganas de permanecer deslizándose, colgándose o balanceándose por mucho tiempo, disfrutando del camino antes de llegar a la meta.
ResponderBorrar¿Te dije ya que me gustan tus juegos de fotos y palabras?
Un beso
Aunque me lo hayas dicho, puedes seguir, Alís, siempre es un placer.
ResponderBorrar:) :) :)
Otro beso grande para ti.
`Me han entrado ganas de cantar una canción de Roberto Carlos. Ainsss ese azul me ha traido a la memoria tiempos pasados.
ResponderBorrarBesos y un gran abrazo.
Muy querida Arantza, me alegra un montón verte, qué bien! Y si te he motivado una canción, mejor que mejor.
ResponderBorrarUn fuertefuerte abrazo.
Siempre me han fascinado los azules intensos en los cielos, con lo cual esas dos fotografías primeras me han hechizado, Virgi.
ResponderBorrarCuánta hermosura hay siempre en tu blog.
Un beso, preciosa.
¡Ay, Isabel, qué cosas tan bonitas me dices!
ResponderBorrarSabes bien que me llegan tus palabras y me regodeo de felicidad.
Muchos besos, chiquilla.
¡Guau! los azules maravillosos, maravillosos.
ResponderBorrarMe encanta el color azul de tus fotografías, perdona, no me fijé en nada más.
Besos
La obra y la arquitectura de lo humano no sólo se levantan desde la tierra sino que también pretende enganchar el cielo, como las ramas al lado de las grietas por donde se filtra el azul en humedad y agua.
ResponderBorrarAsí es el arte siempre atento a las estrategias de la vida!!!
Besos Artista!!!
¡lINDÍSIMAS FOTOS! ¿eL AZUL ES ASÍ EN TODOS LOS SITIOS?
ResponderBorrarEse es mi azul :))
ResponderBorrarBesos y salud
El mar inverso.
ResponderBorrarPeces alados.
Bs.
Qué azul más impresionante, querida Virgi. Y esas nubes, como si los árboles fueran de nube.
ResponderBorrarUn abrazo
¡Pícara, la salamandra!
ResponderBorrarBesos, querida Virgi.
Ya es bastante, Pamisola, el próximo día te fijarás en otras cosas.
ResponderBorrarMuchos besos
Eso, eso, buscando el cielo, tal vez la eternidad. Todo un camino hacia lo infinito y lo desconocido.
ResponderBorrarAristos, un abrazo grande.
Buena pregunta, Juan, depende del día, la hora, el tiempo, el cielo, la época, la cámara, el ojo, el viento...y muchas más variables que tú sabes mejor que yo, ji ji...
ResponderBorrarPues a ver si te veo difuminado en él, Genín. No me extrañaría nada, a la espera estaré, besos y besos.
ResponderBorrarY tu voz llegando entre sus aletas, Sarco, tan lúcidas.
ResponderBorrarBesos abrazos
Marichuy querida, las nubles me llevan a ti, sobre el mar, las montañas y las llanuras.
ResponderBorrarOjalá fuera tan fácil, mi abrazo bien grande.
Es lo que tiene, que se camufla bien y los entresijos le cuadran a la perfección.
ResponderBorrarUn guiño, un beso, Myriam.
Qué bonitas imágenes, siempre tan bien acompañadas de breves palabras que forman un conjunto delicioso.
ResponderBorrarUn abrazo.
Haces honor al nombre de tu blog. Poética pura. Si las fotografías son fantásticas, le doy más valor a las palabras que las engarzan, de oro, como tus ocres.
ResponderBorrarBesos profundamente admirados, Virgi.
Como una melodía de jazz, a tu azul le sientan bien las improvisaciones.
ResponderBorrarMe gusta mucho el azul cuando tiene nubes... o se jenta con el mar.
y Sí ahí está con el mar cosido por el horizonte.
He notado la brisa en mi cara y me han llegado sin contratiempos tus deseos de mar a Madrid.
Muchas gracias, Virgi, por eso, por tus comentarios siempre tan divinos y por este remanso de belleza poética al que nos permites asomarnos.
Un beso
Mi satisfacción, Ladelmedio, si lo has encontrado tan cautivador, un abrazo grande.
ResponderBorrarIsolda, millones de gracias. Es muy gratificante tu visita, mucho, tan expresiva como sueles.
ResponderBorrarTambién montón de besos. Si te gustan, pues ocres y azules.
:) :) :)
Un cumplido muy hermoso el tuyo, Tesa. "Remanso"...¡ah, gracias!
ResponderBorrarSólo con esa palabra ya me dejas contentísima.
Muchos besos, muchos.
Un plan bien maquinado, por las grietas sólo se puede colar la luz... y los dragones.
ResponderBorrarbsÖs soleados.
Los azules brutales, contrapuestos a la triste grisura del mundo... Un abrazo.
ResponderBorrarPor cierto, Sole, que en el Hierro hay unos tremendos lagartos que seguro proceden del que, según la leyenda, cuidaba las manzanas de oro en una de los trabajos de Hércules.
ResponderBorrarBesitso, linda chica.
Gris...o cada día más negro, querido Joven?
ResponderBorrarEs lo que hay, un abrazo grande y tierno.
Precioso relato el de las cicatrices, Virgi. El peluche se salvó de ellas, me alegro por él; porque los humanos acumulamos muchas durante nuestro periplo vital, a veces demasiadas para que no se noten.
ResponderBorrarUn beso
Grietas y cicatrices que nos modelan y no podemos obviar, por mucho que nos empeñemos.
ResponderBorrarUn abrazo, apreciada Ginebra.
Ese inmenso azul de mar y cielo, tiene el doloroso contrapunto de esas cicatrices ocres de tierra dolorida.
ResponderBorrarBellas fotos.
Un abrazo.
Extraño animal la luz, escurridiza y camaleónica, en los días claros gusta del azul. Adopta todas las formas imaginables, y también las otras.
ResponderBorrarUn beso, Virgi cazadora.
Bellísimo Virgi y ese azul tan profundo habla por sí solo.
ResponderBorrarBesos.
Luz azul, palíndromo perfecto en tus imágenes y palabras.
ResponderBorrarBss
ResponderBorrarDolorosas... siempre el dolor nos acompaña. Inevitablemente.
Buena serie fotográfica. Cuida las horizontales y las verticales, para que no te crucifiques...
· BdPH
· CR · & · LMA ·
Si alguna vez no me encuentras, búscame en el azul, que allí estaré esperándote, Virgi.
ResponderBorrarSi te apetece compartir tus relatos pásate por aquí
ResponderBorrarhttp://280ypunto.blogspot.com.es/
un saludo
Siempre miras de un ángulo muy interesante, Juan L., un placer +++
ResponderBorrarBesos besos
Cazadora, dices...¡ah, Xuan! el del Gran Ojo, Gran Palabra, profundidad de mirada y verbo.
ResponderBorrarGracias, un beso grande.
Sí, querida Pluma, había unos azules radiantes ese día. Son todos del mismo paseo.
ResponderBorrarTe abrazo fuerte fuerte.
Tus piropos, Gato, son muy halagadores y me enorgullecen un montón.
ResponderBorrarBesitos y muchos miaus!
¡Ños, Ñoco, no se te escapa ni una! Ya me he dado cuenta que me pasa muchas veces, debe ser que al apretar el ¡clik! se me descompensa la horiz/vert.
ResponderBorrarBesitos, agradezco todas tus anotaciones, sé que lo sabes.
Ojalá pudiera ir hasta esos azules y traerte conmigo un rato, querida Tecla. Lo intento, no creas, lo intento.
ResponderBorrarTodo llegará, cosas más difíciles han sucedido.
Un beso, un abrazo.
Gracias por la invitación, Maraga, un beso.
ResponderBorrarOtra feliz conjuncion de imagenes y palabras, azuladas ahora...
ResponderBorrarUn abrazo,amiga
¡Quién se colgara de un ramaje así! Y cantar la canción del elefante y soñar con las nubes y beber azules y...
ResponderBorrarLindo, relindo.
Esas ramas que vigilan el agua y el azul, me gustan tanto...
ResponderBorrarAbrazos
Es que me miras con buenos ojos,apreciado Antiqua.
ResponderBorrarMucho que te lo agradezco, pero mucho.
Un fuertísimo abrazo
Por soñar, Mar, que no quede. Sobre todo cuando están encima de nuestras cabezas esos cielos luminosos.
ResponderBorrarMuchos besos.
Como para balancearnos un rato juntas, Isabel. y contarnos nuestras cosillas, mientras el sol se pone en el horizonte.
ResponderBorrarUn abrazo grande, querida.
Azul profundo y sereno...pero algo no cuadra. Parece una inversión desde la felicidad y la plenitud hasta el dolor y el retaimiento. Un abrazo, amiga. Hermoso, pero duele.
ResponderBorrarCon tu mirada tan personal y poética, querido Mateo, le das una vuelta de tuerca que me sorprende y me encanta.
ResponderBorrar¿Cómo no gustarme que vengas? Un abrazo bien enorme.
ResponderBorrarQué lindo.
Besos a tu cámara.
Buena idea, Clarice, ella también se lo merece, se los daré.
ResponderBorrarBesos también para ti.
Resguardarse en los propios recuerdos, aunque no sean tan accesibles y cómodos.
ResponderBorrarUn abrazo azul otoñal
Una protección no siempre ventajosa, no te parece, Esi?
ResponderBorrarLos recuerdos pueden jugarnos muy malas pasadas.
Besitos, linda.
Mucho azul, mucho azul, pero yo me quedo con esos ocres, algo tristes, pero reales y como de paleta.
ResponderBorrarY si hay que enredarse en esas ramas, voy contigo.
Besotes
Estoy desesperado. ¿Dónde está Larisa? ¿Por qué no me abre El Comonunca? dime Virgi
ResponderBorrarTodo queda mejor con un fondo azul, comprobado :)
ResponderBorrarOk, te aviso, María, :) :) :)
ResponderBorrarLos azules son muy llamativos, pero los ocres tienen un algo ancestral, no?
Besos besos
¡Ay, Dory Per, si yo supiera! habrá que ponerle un detective de los buenos...otra cosa no se me ocurre...bueno, haré un par de investigaciones y te digo si saco algo en claro.
ResponderBorrarSorry sorry sorry.
Sól hay que ver el mar y el cielo, Beauséant.
ResponderBorrarY por cierto...¡qué bien que vuelves! voy ahora a visitarte, abrazo laaaaaargo!!!
BEAUSÉANT, QUE SEPAS QUE HE INTENTADO PONERTE COMENTARIO VARIAS VECES, PERO EL MALDITO CÓDIGO DE "QUE NO ERES UN ROBOT" NO ME LO PERMITE. LO SIENTO PERO MUCHÍSIMO.
ResponderBorrar(ah, he intentado escribirte email, pero no veo la dirección en tu perfil)
ResponderBorrarBesitos
Si, entre el deslizarse, el colgarse y el balanceo...yo prefiero acurrucarme en la mecedora de la abuela y dejarme llevar por su confortabilidad. Aunque haya practicado todas las acciones, acurrucarme hace que desaparezcan las cicatrices. Este azul es muy intenso. Un beso, Virgi.
ResponderBorrarAzules por donde trepar, escalando y trepando entre ramas, imágenes, y un instante poético.
ResponderBorrarLas grietas, sólo para esconderse, para penetrar en los orígenes de la tierra.
Besos, tesoro.
Y para taparlas y saber que nos sirvieron para madurar, aprender, crecer.
ResponderBorrarEl azul,para acercarnos.
Con besos y ternura.
Eva, te sonrío, sabes?