Quiero recordarme leyendo en la infancia serena, en un
pueblo pequeño y una casa grande. Cuentos, colorines, vidas ejemplares,
personajes históricos, novelas ilustradas, libros de mis padres y hermanos.
Leer a escondidas, leer bajo las sábanas, leer a la sombra de un árbol, leer
sobre un diván.
Me pienso leyendo a Robinsón y a Don Juan Tenorio, a
Rasmus, Stefan Zweig, Víctor Hugo. Escuchando en la radio de la cocina las historias de La Ballena Alegre y su tonadilla
del ColaCao, oyendo a mi madre contarme un cuento y a mi padre buscando en sus
enciclopedias.
A veces leía con frenesí, esperando el momento libre para
pasar la página que me aguardaba. Otras, releía emocionantes pasajes. Los
domingos, usaba el sobrante del cine para conseguir el último Vidas
Ilustres, El Jabato o El Cosaco Verde. Me enamoré perdidamente de Crispín,
compañero de aventuras de El Capitán Trueno.
Mi afición eterna por leer nació viendo como otros leían
y me leían, y la vida que soñaba ocurría entre las páginas.
Capítulos,
asteriscos, números romanos, Pompeya, Edison, María Estuardo, Julio Verne, Ibáñez,
Ferrándiz, índices, dedicatorias, editoriales, lomos, olores…el mundo estaba en
los libros y yo lo recorría con ellos.
Aún sigo de viaje.
Qué bella remembranza, ¡Cuanto has leído! A veces recuerdo mi infancia también pero no me veo leyendo tanto libro. Eres genial Virgi.
ResponderBorrarMil besos amiga.
Feliz domingo.
Gracias, querida Pluma, me encanta que inaugures tú este nuevo formato, que bastante me ha costado componer la entrada.
ResponderBorrarMuchos besos, montones.
Un vicio maravilloso, que sueño heredar a los que me suceden. Un abrazo.
ResponderBorrarPara mí de los mejores, Joven.
ResponderBorrarBesos
Leer debajo de las sábanas, qué recuerdo más bonico...
ResponderBorrarLeer, leer, leer....¡Feliz día del libro!
Besicos...
Ah, me gusta el estilo de tu ventana.
No veas lo que me costó hacer los cambios, Cabopá. A ver si puedo hacer algunas cosillas con este nuevo formato.
ResponderBorrarMuchos besos
Y si me lo permites, te acompaño en este viaje que espero sea eterno.
ResponderBorrar¡Pues claro, Alma! Un abrazo.
ResponderBorrarTambién descubría la lectura siendo muy niña y, como tú, a todas horas leía cuando no estaba en el colegio. Recuerdo los tebeos (¡cómo no!), las películas en libro de Walt Disney (unos tochazos que sólo caían por Reyes), las aventuras de los cinco, y tantos y tantos otros.
ResponderBorrarCreo, querida Virgi, que a quien le gusta leer es porque ha hallado el gran secreto: el de una vida paralela, esa que le permite vivir miles sin levantarse de un sillón.
Un besazo, querida amiga.
P.S.- Muy bonico el nuevo diseño, cálido y sencillo, como tú eres.
¡Qué bien que te guste, Isabel!
ResponderBorrarMe llevó mi rato lo de investigar.
Y nada como leer, una gozada cuando estamos en esos momentos que no cambiamos por nada, sólo leer y leer.
Me encanta que estés de regreso.
Un buen abrazo
¡Cómo me suena todo eso que has escrito! También leía al Capitán Trueno y me encantaba, así aquellos sobres sorpresa que me compraba el domingo que no iba al cine, ¡que época más bonita, cuántas aventuras y cuantos paisajes recorridos y cuantos personajes conocidos!!
ResponderBorrarBonito, muy bonito.
Besicos muchos.
ResponderBorrar· Celebro el cambio de formato. Te permitirá ilustraciones y fotografías más grandes. Sigue trabajando los fondos. Ya encontrarás el modelo que te guste.
Bueno, y de libros va la cosa... y si, leer es hacer entrar mundos nuevos en nuestro reducido mundo. Es hacer crecer nuestras mentes. Leyendo mucho uno no tiene tiempo para ir a cazar elefantes.
· BdPH
CR. & .LMA
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·
¡Qué recuerdos! Y el TBO Y la colección de clásicos juveniles de Bruguera.... Y Julio Verne, Salgari... ufff!!!! Cómo pasan los años!!
ResponderBorrarbesos
Ya...
ResponderBorrarYo soy de mas atrás...
De "El guerrero del Antifaz", "Roberto alcazar y Pedrín", "Azañas belicas", "pulgarcito" "TBO".
Estoy jodido, y para esto de la edad no hay remedio, y si, me jode mucho...Snif...
Besos y salud
Lo importante que fue crecer en medio de tantos cuentos. Tal vez llevemos un poquito de esa fantasía y eso nos permita volar de vez en cuando.
ResponderBorrarUn abrazote
Hemos elegido el mejor camino. El más bello de los mundos.
ResponderBorrarBs.
Y además, Sarco, con millones de posibilidades. Un abrazo
ResponderBorrarQué hermoso viaje sin fin...leer, leer, ha contribuido a ser lo que eres... Quiero intoxicarme de lectura, no dejar de soñar y viajar a través de ella...
ResponderBorrarUn cariñoso abrazo, Monique.
Pues yo me enamore de Sigrid, la novia del Capitan Trueno...
ResponderBorrarY ella me correspondió...
Y todavia nos seguimos amando...
Un abrazo, amiga
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrar¡Qué lindo recorrido, Virgi!
ResponderBorrarPara mí la lectura siempre fue un gran refugio y fuente de aprendizaje.
Besos
Tengo que confesar que no había caído en que hoy es el dia del libro. Por fortuna el despiste me ha pillado leyendo.Virgi, hay cosas que resultan necesarias,imprescindibles. Comer, beber, leer...
ResponderBorrarLuego aunos les gusta más la carne y a otros el pescado.Da igual,lo importante es ir probando sabores durante el viaje. A mi los tuyos me encantan...Un abrazo.
¡Aaaah, me ha encantado esta entrada homenaje! La importancia de leer: vivir otras vidas, viajar, intentar comprender otros mundos y culturas diferentes, imaginar... ensanchar el cerebro.
ResponderBorrarEl fascismo se cura leyendo... una frase que sigue vivita y coleando.
A estas alturas de la Historia, con toda la información al alcance de un clic, quien no lee es porque no quiere saber.
BsoT, BsoT.
PD: te dejo un libro, "Los enamoramientos", de Javier Marías.
http://www.descargas-libros.com/2011/07/los-enamoramientos-de-javier-marias.html
(Que conste en acta que no suelo recurrir a las descargas, soy de tocar papel y pasar páginas)
Bonito homenaje a un día muy especial. Pues sigue viajando, Virgi, porque cada viaje será distinto.
ResponderBorrar¡Si no fuera por los libros, la música y el arte, la vida sería un vacío inmenso y pegajoso!
Si no fuese por los viajes y por los amigos, por la buena gente para compartir un debate, una lectura, la vida sería un desierto, pero en lugar de abrasador, sería gélido.
Besos
Soy como tu,, desde pequeña me gusta leer, recuerdo aún los libros de niñas que ibana internados, también tebeos y novelas que robaba e la bibblio de mis padres...es un mundo que trasporta la lectura...es un universo interminable...
ResponderBorrarBesos
yo recuerdo el aburrimiento mortal anterior a la lectura,... y con su llegada, la LIBERTAD
ResponderBorrarbesos virgi
Hola Virgi, sigue leyendo!
ResponderBorrarFeliz día del libro.
Un abrazo.
Tu eres viento, palabras, aroma a libros y belleza.
ResponderBorrarBesos!
Tener el blog también tiene que ver con la lectura, las palabras, el aprendizaje, la comunicación...
ResponderBorrarGracias por pertenecer a este mundo, un montonazo de besos para todos.
Capitán Trueno, sigue acompañándome...y es que el mundo de los libros no iguala a ningún otro. He viajado, reído, llorado...sin levantarme del sillón. Sigo haciéndolo y a veces, cuando termino un libro me quedo varios días echando de menos a sus personajes de los que me siento parte.
ResponderBorrarFeliz día.
Ese amor a la lectura es único e incomparable… Realmente hace soñar. Un placer leerte.
ResponderBorrarYo también leía con pasión, con fruición. Ahora menos, por razones aburridas en las que no entraré...
ResponderBorrarUn beso, amiga lectora
Ay, los libros, a mí me han salvado.
ResponderBorrarEsos mundos imaginarios me libraron en mi niñez de la soledad, acunaron mis ausencias y me llenaron la cabeza de historias y paisajes y el corazón de sentimientos.
Por eso me uno a tu celebración, Virgi.
Un beso,
Tal como lo dices, Tesa, también lo siento parecido. A mí me dieron tantísimo!!!
ResponderBorrarOtro beso, cielo.
Devoré todos los tebeos que caían en mis manos. Me saqué el carnet de la biblioteca de verano de mi barrio y me leía un libro al día...
ResponderBorrarQué cantidad de lecturas estupendas, qué envidia. En mi casa, el ABC, las obras completas de José Antonio en cuatro tomos y Mi lucha. Imagínate. Nada de "deslumbramiento" por la lectura de La Isla de tesoro, ni nada de nada.
ResponderBorrarEstoy contigo, con el Jabato, con el Capitán Trueno, con El Llanero Solitario, con Mariuca la Castañera( mi favorita y lo conservo),con el Urbano Ramón, El doctor Hazo, la Ardilla Hacendosa y Mari Pili en Biscuter...Y aunque mis experiencias con la lectura fueron otras...http://yotanci.blogspot.com.es/2012/02/renovarse-o-morir-aquellos-libros-estos.html siempre otros mundos, siempre otros misterios, siempre otros amores... Siempre algún libro a nuestro alrededor.
ResponderBorrarLlego un poco tarde, incluso a comentar tu anterior entrada,pero me ha gustado tu renovado look. Estoy volviendo...Un fuerte y caluroso abrazo, Virgi.
Un buen libro, la soledad y un abrazo.
ResponderBorrarY tú, querida Virgi.
Cómo no recordar al leerte esa lista infantil que llevamos dentro, gracias a, como bien dices, ese amor a la lectura de nuestros padres, etc.
ResponderBorrarMe parece importante también a que no había tantas pantallas como ahora para atontarnos.
Besos.
¡Qué maravilla de recuerdos!
ResponderBorrarLo más fantástico es que sigas de viaje.
Un abrazo muy fuerte
mi despertara a la lectura fue tardía y de repente... en casa había pcoos libros y los cuentos estaban de adorno, hasta que empecé y ya no pude parar... todavía sigo de viaje.
ResponderBorrarbiquiños,
Lo `rimero que leí siendo niña, un volumen (antiquísimo, editado por Aguilar) de Cuentos de Hans Christian Andersen. Sufrí y me gustó.
ResponderBorrarUn abrazo grande, querida Virgi
La lectura fue una de las mejores experiencias de la infancia. Era una forma fabulosa de viajar a otros mundos increíbles hasta entonces.
ResponderBorrarBesos a modo de señalador de página.
y el mundo sigue estando en los libros, como tu dices, creo que los medios electrónicos reemplazan mucho al libro, saludos querida amiga
ResponderBorrarHabrá que adaptarse a los nuevos medios, querida Abu, pero siempre en pos de la lectura.
ResponderBorrarBesos para ti
Los ojos que viven entra hojas impresas, vuelan sobre horizontes sin asperezas.
ResponderBorrarAbrazos!
Creía seguirte los pasos de cerca,pero ya veo todos los que se me han adelantado. Será que me entretuve leyendo algo en lo que coincidimos...¿y los inventos disparatados del profesor no los recuerdas?
ResponderBorrarBeso gordo, Virgi
Me ves? Estoy a tu lado en ese viaje maravilloso.
ResponderBorrarTe felicito por este texto tan hermoso
Besos
Gracias, Trini.
ResponderBorrarY me alegra que hayas vuelto.
Un abrazo grandegrande
¡Jo, es verdad, Edgar, acabo de recordarlos leyéndote! Eran increíbles, súper bien elaborados.
ResponderBorrarUn besote para ti.
Yo viajo leyendo..a mis hijos trato de inculcarselo desde pequeñajos..a ver si les dejo algo de poso...un beso desde Murcia...
ResponderBorrarEn casa se leía menos que en la tuya...pero algo se leía, además, mi tía vivía al lado y ella es de mucha lectura, a ella, podemos decir que le heredamos lo de leer...
ResponderBorrarHubo muchos libros en mi infancia, quizás más de los que hay ahora, porque como era ávida en eso de meterme en líos ( y sigue siendolo) secuestraba cosas del librero y sin importarme si eran para mi edad o no, los leía. A los 9 años leí Belle de Jour y marcó buena parte de mi infancia y probablemente de ahí es que tenga ese gusto marcado por las mujeres de moral divertida como heroínas de novelas.
Un besito.
Excelente entrada.
Entrañable remembranza de esos títulos que marcaron tiempo y vida
ResponderBorrarpara decir algo, te cuento que desde nena leía y no siempre cuentos, ya que en casa no abundaban los libros, sino el diario y sus noticias rojas, económicas, culturales y hasta las editoriales y opinión pública, luego cuando aprendí a movilizarme en el transporte visitaba la biblioteca pública y los textoslibros del colegio también fueron mis compañeros de este viaje por las letras :)
Besitos y luz, feliz feliz semana
Envidia me das con tu infancia lectora. No tuve yo esas posibilidades que descubrí ya bastante más tarde.
ResponderBorrar¡GM, quién no lo ha leído!
Besos, Virgi
Es un placer conocer más detalles sobre ti; también viendote y leyéndote apetece escribir con este cariño y con tanta ternura.
ResponderBorrarUn abrazo Virgi.
Me ha parecido una estupendo modo de celebrar el Día del Libro.
:))
Gracias, tan tierna tú como acostumbras, montón de besos.
ResponderBorrarlo libros siempre fueron un refugio seguro, ¿verdad? quizás no tenías todos los amigos que querías, o tus padres no te llevaban a los sitios que te gustaría, pero en las páginas de un libro todo eso desaparecía.. al final los personajes de tus libros favoritos resultan más reales que los de verdad.
ResponderBorrarTe veo leyendo, te veo escribiendo, te veo haciendo fotos. Voy a corregir mi tardanza.
ResponderBorrarBesote, Virgi
Pues si, Beauséant, así era y muchas veces sigue siendo. Los libros, un mundo que nos acoge, nos abriga, nos hace crecer.
ResponderBorrarBesos y besos
Veo que sí, que los recuerdas...¿cómo se llamaba el profesor?
ResponderBorrarY qué placer vivir aquellas vidas entre líneas. Toda esa fantasía que nos sobrevivirá. ¿No es eso lo que mueve el mundo? Y lo que nos conmueve.
ResponderBorrarUn gran abrazo
Chuff!!
¡Ah, Zeny, encanto de chico! Gracias a lo que ha quedado y quedará, seguirá el mundo.
ResponderBorrarSi es que no se harta de nosotros.
Besos y más besos
Yo me enamoré del Capitán Trueno...
ResponderBorrary de las biografías ilustradas, de Las Mujercitas y los corsarios, de Flaubert, de una tal Bobary de la que mi madre era fan.
Navegamos por ellos y dejamos lágrimas, risas y un legado de sensaciones que llevaremos por siempre grabadas en la piel y en la sien...
Una preciosa entrada, tesoro.
¡Vaya dos! Tú con el Capitán (te va, te va, sí, sí) y yo con Crispín ja ja ja...me encantan estos empates.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo, cielo de chica.
Ay, Sigrid...!
ResponderBorrarMe encanta que no hagas distingos hablando de lectura y que metas en ese mismo mundo tanto las novelas como los cómics.
Un abrazo
Ismo, tesoro, es que para mí los cómics (o colorines, según los llamábamos aquí) son una parte fundamental de mi vida. Coleccioné en una época y tengo algo de lo más relevante.
ResponderBorrarPara mí, Corto Maltés, Jeremiah, Los pasajeros del viento, Spirit, Blueberry, Little Nemo, M. Prado, Moebius...es puro arte comparable a cualquier buena película.
Luego dejé el coleccionismo y ahora ni siquiera compro, por falta de espacio/dinero/futuro.
En fin, algún día podemos hablar más extensamente. Un abrazo grande, que a mí me ha encantado que me pusieras este comentario y no otro.
Es la mejor niñez. Ojalá todos los niños del mundo -incluido los mundos pobres, incluido los mundos en guerra- puedan tener la misma oprtunidad, de nacer y crecer entre letras, dentro de la imaginación transmitida de generación en generación.
ResponderBorrarNo sé si corremos cada día más peligro de que esto se vaya perdiéndo para dar paso a otras cosas nuevas.
Un beso.
Pues no sé, Víctor.
ResponderBorrarLa mayor parte de las veces lo veo todo tan negro...tanta gente mal...tanto anciano sin posibilidades...niños, jóvenes...¡ay, qué tristeza me está entrando!
Un abrazo grande y gracias por todas tus visitas.