Avanza la oscuridad entre la luz. Sobre el piélago azul se recortan las torres, que, tímidas, quisieran crecer más allá de los tejados. No saben que en cuanto la luz las abandone, serán pasto de la noche. El poder de las sombras barrerá los colores, las formas y el brillo del día.
Una cúpula aquí, un campanario más allá, dibujan la geometría del horizonte, el cercano, aquél que aún podemos alcanzar antes de la noche. Se han ido las palomas, los lagartos duermen bajo las tejas, las mariposas baten sus alas en el jardincillo, festoneando la tarde con el aleteo fugaz y rutilante de los insectos prodigiosos.
Yo veo un cielo sin nubes, la línea blanca y quebrada de este horizonte posible, las minúsculas plantas más arriba de la tierra. Y según voy viendo, la sombra progresa y el horizonte se difumina. Nada ha de quedar, ni la luz para ver la oscuridad.
Foto Virgi
Una cúpula aquí, un campanario más allá, dibujan la geometría del horizonte, el cercano, aquél que aún podemos alcanzar antes de la noche. Se han ido las palomas, los lagartos duermen bajo las tejas, las mariposas baten sus alas en el jardincillo, festoneando la tarde con el aleteo fugaz y rutilante de los insectos prodigiosos.
Yo veo un cielo sin nubes, la línea blanca y quebrada de este horizonte posible, las minúsculas plantas más arriba de la tierra. Y según voy viendo, la sombra progresa y el horizonte se difumina. Nada ha de quedar, ni la luz para ver la oscuridad.
Foto Virgi
Por mucho que avance la oscuridad, el poder de tus palabras no dejarán de sur luminosas.
ResponderBorrarBesicos preciosa.
Debe ser la luz del mar. Que también tú conoces muy bien. Gracias, Mari Carmen, un beso.
ResponderBorrarEso es saber describir poeticamente lo que se deduce de una fotografia.
ResponderBorrarSaludos.
Diez minutos más y nos describes el latir del último calor que huye de los tejados....
ResponderBorrarNo escribes, pintas con palabras.
besos
Llevas razón, Virgi, pero cuando llegan las sombras, todo se vuelve espíritu. Alma al fin.
ResponderBorrarQué gracia tienes haciendo fotos hija.
"Nada ha de quedar, ni la luz para ver la oscuridad."
ResponderBorrarEse verso final, màs que metàfora, suena como parabola, es la perfecta conjunciòn de la vida, avanza, para que quede nada. Es tan profundo detrás de su aparente sencillez... Me gusta mucho, Virgi.
Un abrazo enorme.
Leo
Una buena definición de la entrada de la noche.
ResponderBorrarTu fotografía me recuerdo los techos de nuestra querida Antigua Guatemala, me hizo sentir la misma sensación que he tenido cuando la noche entra en este lugar querido.
Besos Virgi, gracias por tu paso por mi blog, que disfrutes de una Feliz Navidad en compañía de tus seres queridos.
Hasta pronto amiga.
Ha sido una bella lectura.
ResponderBorrarMuchos besos,
Oscurecerá, llegará la noche y siempre estarás ahí para llenarnos de luz. siempre sabes poner luminosidad a tus fotos y tus fotos a tus palabras. como siempre, precioso.
ResponderBorrarBesicos muchos.
Preciosa entrada. Has convertido algo común en algo insólito. Las torres y esa hierba que parece andar a hurtadillas por el tejado, fuera de su lugar, me sugieren una especie de ritual oculto inesperadamente revelado, puesto al descubierto por su propia impaciencia.
ResponderBorrarAntes de la noche se puede alcanzar la belleza de tus sentidos, expuestos y llenos de ti y tu belleza.
ResponderBorrarUn beso!!
É a noite que se aproxima...
ResponderBorrarYo soy un noctambulo empedernido, lo que no significa que no ame el sol y el cielo azul!
ResponderBorrarBesos y salud
Deja un resquicio de luz, anda...
ResponderBorrarUna perla más de las tuyas.
Nunca dejarás de maravillarme.
Besos, tesoro.
Para perlas, querida Eva, tus collares, sacados de un cofre luminoso y siempre nuevo.
ResponderBorrarBesitos, joyita de chica.
Buenos días, de nuevo me haces esbozar una sonrisa de oreja a oreja,con tu luz...
ResponderBorrarGracias!
Besos
A mi este texto me ha sonado muy de la tierra. Bueno, el paisaje que describes. Es como si yo estuviese mirando por la ventana en una tarde de julio mientras el sol pierde furia y se inclina al poder de la sombra.
ResponderBorrarMaravilloso
Besos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarVirgi, si no hubieras puesto la foto, podría habérmela imaginado al leer tu texto. Los preciosos lagartos de tu tierra vuelven cada día a sus tejas sin sombra. Y las palomas. Por eso me gusta tanto pasar por aquí.
ResponderBorrarYo veo un cielo sin nubes.
ResponderBorrarAunque las hubiera, ya sabemos que las nubes son nómadas.
Me gusta mucho la poesía de tu entrada.
Abrazos y mis deseos de felicidad.
Cómo pintas...qué cuadro más increíble nos dejas hoy creado con tu sensibilidad y tus palabras. Todo cobra vida a tu paso.
ResponderBorrarbesos grandes
Tú eres la luz Virgi, la luz del SOL y el mar azul.
ResponderBorrarAcabo de escuchar tu relato "Error" y me ha emocionado.
Gracias por compartir tus fotos y tus palabras con nosotros. Me siento muy afortunada de haberte conocido.
Un beso.
GEometría y belleza del cielo en esta imagen. Si es verano, se agradece el avance de la sombra, si es invierno, se teme.
ResponderBorrarQuizá todo sea más cierto en sombras.
Besos.
Sombras y luz. La cara y la cruz de una misma moneda. Una metáfora de nosotros mismos...
ResponderBorrarBesos
La luz y las sombras se alternan, querida Ginebra. Y no siempre estamos a gusto en ninguna de ellas. Quizá queramos algo que no sabemos.
ResponderBorrarBesos, besos, besos.
El poder de las sombras es grande, pero limitado: siempre vuelve la luz para espantarlas.
ResponderBorrarSomos cíclicos, como la naturaleza, pero algunos tienden siempre a la luz, y tú eres uno de esos afortunados, querida Virgi.
Un besazo.
Es que me quieres bien, querida Isabel, gracias, tesoro.
ResponderBorrarMuchos besos
No me llegará la noche para visitarte, no.
ResponderBorrarAtardece y aquí vengo a leerte, hermosa.
Besos, Virgi
Qué curiosas resultan las torres vistas así, como recortables sobre los tejados.
ResponderBorrarMe encanta cómo vas viendo las sombras progresar.
Un abrazo.
Qué diferencias en el colorido de tu tierra y la mía: el tuyo, contundente, preciso; el mío difuminado y gris.
ResponderBorrarAsí es desde la noche de los tiempos: Avanza la oscurida hasta estrellarse de pleno en las albas auroras
ResponderBorrarY ya el día instala su hermosura.
Perfecto tu relato
Me parece a mi conocer ese campanario y esa cúpula. Y si es la que creo que es , entonces es dónde se entonan cánticos a muchas voces. Cánticos con luces y con sombras que, decorados con las notas musicales componen festones de mil colores... no había lagartos, pero só campanillas. NO habían mariposas, pero si un gran aleteo encompases de cuatro por cuatro. Y las palomas después de haber dejado un mensaje de Paz... volaron y estuvieron perennes en tu tejado. Tan bello y tan claro... ¿La Concepción de La Orotava vista desde lo alto? Magnífica composición de luces, sombras, palabras y sensibilidades sentidas. Un fuerte abrazo, querida Virgi.
ResponderBorrar¡¡¡Adjudicado, Tanci!!!
ResponderBorrarNo desde lo alto, sino desde la propia plaza. Tan preciosa la ciudad que siempre llevo a la gente que viene de fuera. ¿Así que has cantado ahí? A ver cuando vamos a oírte/verte.
Muchos besos, muchos.
Bellas palabras atentas al ir y venir de la luz; es como el ánimo que se esconde a la espera de la próxima primavera, observador y confiado de que todo vuelve. Un abrazo, Virgi.
ResponderBorrarY todo se convertirá en oscuridad...
ResponderBorrarSaludos y feliz domingo.
Mientras dure el día , todo será más hermoso, más brillante, aunque la noche tiene también su luz de luna. Abrazos.
ResponderBorrar· Por mucho que avance la oscuridad,en breves día, será vencida.
· un beso
… y Feliz Solsticio de Invierno, que el Sol gana la batalla…
CR & LMA
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Impresiona este avance de las sombras, tanto como el cielo diáfano.
ResponderBorrarUn beso, Virgi y ¡Muy Felices Fiestas!
Me encanta la fotografia porque, sobre todo, gracias a la fotografia uno a aprendido a amar la luz...
ResponderBorrarUn abrazo, amiga
Te entiendo bien, Antiqua. Yo empecé a comprender un poquito de la luz gracias a la pintura, con artistas como Vermeer, Caravaggio, Monet.
ResponderBorrarUn abrazo grande.
Que bonita sintonía entre los colores amarillo y azul, por eso la sombra trata de engullirlos ahora que se siente poderosa, pero mañana será otro día y volverán a surgir los colores, los que sean.
ResponderBorrarUn abrazo.
La última frase me ha embelesado, Virgi, es un broche de oro, la guinda sobre el pastel.
ResponderBorrarBsoT.
Alternancia necesaria. No podríamos vivir sin la una ni la otra. Y así somos, hechos de luz y de sombras.
ResponderBorrarUn abrazo, Virgi
creo que la luz siempre encontrará una forma de estar allí, estuvo al principio del mundo, y seguro que queda algo de ella cuando no quede nada, ¿no?
ResponderBorrarPequeñas certezas que nos sirven de vez en cuando, no? Besos, Beauséant.
ResponderBorrar"Sobre el piélago azul se recortan las torres, que, tímidas, quisieran crecer más allá de los tejados. No saben que en cuanto la luz las abandone, serán pasto de la noche..." Ooohhh, me admira lo bien que escribes. Espero tu texto para aquel cuadro. :-)) Si te apetece, claro!!
ResponderBorrarBesos
Y si todo dormirá, y si las estrellas velarán los sueños, yo seré una yerba entre las yerbas. Pasto y aire. Sólo me queda esperar.
ResponderBorrarUn abrazo. (Qué bonito!!)
chuff!!
Pero en la oscuridad queda el latido, y el avance de los otros sentidos. Hacer de la noche nuestra aliada, un hermoso reto para los que andamos pendientes del mirar.
ResponderBorrarEsta entrada tiene la luz y el tempo exactos. Eres una maestra del equilibrio.
en realidad creo que las pequeñas certezas son precisamente lo único que tenemos :)
ResponderBorrarGracias, Xuan. Mira que ser tú el que habla de maestría...¡chiquito un piropo me dejas! Besos
ResponderBorrarCertezas, Beauseánt, las mínimas e imprescindibles para no desfallecer.
Más besos
Sombras necesarias, pero sin excederse, no te parece? magnífico ese festoneo al caer la tarde.
ResponderBorrarBeso grande
Ver la luz muchas veces es cuestión de saber ver...
ResponderBorrarbesicos
Bellísimo texto, virgi. Mirando la imagen, me venían a la cabeza esos tejados llenos de plantas que ví sobretodo en La Laguna. Y qué lastima que todo ello haya de ser pasto de las sombras, como apuntas. Aunque te has guardado un as en la manga: recordar que vuelve a amanecer cada día. Que tengas unas fiestas maravillosas con los tuyos y el año nuevo te siga tranyendo una sutil y poética inspiración. Un abrazo muy fuerte.
ResponderBorrarMi querida Isabel, esos tejados los vimos en La Laguna y esta foto es de La Orotava, donde pasamos pero ya era de noche. Espero volver a hacer algún otro recorrido así contigo en tiempos venideros. Un abrazo grande, de los navideños.
ResponderBorrarNada ha de quedar, pero todo vuelve, hasta la luz, inclusive hasta la oscuridad.
ResponderBorrarFabuloso!!!
ResponderBorrarGracias.
Un beso, Virgi
Podrían ser las palabras con las que empieza la segunda página de una novela, fantástico !!!
ResponderBorrarLa dualidad luz frente a oscuridad forma parte de nuestros biorritmos. Ahora bien la describes de una forma entrañable.
ResponderBorrarUn abrazo y felices fiestas.
la luz luce más con sombras cerca
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrar¡Qué hermosa mezcla de hermoso texto, hermosa fotografía, hermoso paisaje...! Qué elegancia y qué clase.
ResponderBorrarViniendo de ti, apreciado Miguel, me lo tomo como un lindo piropo, montones de gracias y montones de besos.
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarTenemos luz y esperamos por las sombras. Cuando llegan, deseamos fervientemente que vuelva la luz.
ResponderBorrarAbrazo y beso.
Y Feliz Navidad!!!
Qué hermoso relato.
ResponderBorrarUn regalo, Clarice, todas las visitas que me has hecho. Abrazos y besos. Gracias, tesoro.
ResponderBorrarNo, no Virgi, tu solo puedes ver cosas hermosas y llenas de luz, y de buenas vibraciones, y rebosantes de sensaciones, todo eso que ves nos lo transmites con tus imagenes y tus palabras!!!
ResponderBorrarBiquiños y Felices Fiestas!!!
No sé porqué pero he recordado la lucidez de Octavio Paz mientras leía tu texto. Increíble fotografía! Un abrazo.
ResponderBorrarLa foto, preciosa; el texto, maravilloso, ni las sombras de la noche podrán con él.
ResponderBorrarSolo depende de nosotras/os intentar que esa falta de luz no cubra nuestro objetivo y ángulo de visión :))
ResponderBorrarMe aferro a esas cúpulas, al campanario, a la geometría que nos regalas en tus fotografías y poemas, que son excelentes y muy sugerentes.
Feliz Navidad en compañía de los que te estiman y adoran y de los que tu quieres.
Un abrazo muy fuerte
:)
Las siluetas son cuadros, unas veces de acuarelas de luz, en otras ocasiones son del oleo de lo oscuro.
ResponderBorrarFelices fiestas!!
Un gran abrazo para todos, gracias por venir y dejar la energía que traen las palabras.
ResponderBorrarfeliz Navidad, Virgi.
ResponderBorrarMuchos besitos.
Gracias, Alex, muchos besos.
ResponderBorrarFeliz Navidad, cielo.
Me encantan los colores de la toma y el encuadre y leyendo tus palabras siento como la luz avanza mientras las mariposas, los lagartos, las plantas y tu mirada se acomodan a las sombras.
ResponderBorrarHermoso, Virgi. Un beso.
¡Jo, Tesa, qué lujazo que hayas venido hasta aquí! Mil gracias, miles.
ResponderBorrarTu espacio es una verdadera belleza.
ResponderBorrarUn enorme abrazo desde México.
Celeste
¡Caramba, Celeste, qué sorpresa!
ResponderBorrarUn buen montón de gracias y un abrazo muy fuerte.