Sólo había nubes.
Nubes y nubes.
Allí estaban, mirándome.
Traían el aroma del otoño.
Nubes y nubes.
Allí estaban, mirándome.
Traían el aroma del otoño.
Dorados y marrones.
Rojos y naranjas.
Granates y rosas.
Rojos y naranjas.
Granates y rosas.
Eran nubes, sólo nubes.
Del cielo se desprendían las hojas.
Y eran nubes, sólo nubes.
Del cielo se desprendían las hojas.
Y eran nubes, sólo nubes.
Me donaron el otoño.
Fotos Virgi
Rojas nubes de otoño.
ResponderBorrarSon el otoño.
Tan bello.
Besos.
¡Qué maravilla que las nubes te traigan hasta aquí, querido Ybris!
ResponderBorrarY tan poético, escribas lo que escribas.
Un abrazo. Grande, fuerte, tierno.
Espectacular tu otoño
ResponderBorrarhasta los árboles van a hacer una pausa mientras se desnudan para mirar tus nubes
Besos
Precioso paseo por las nebulosas otoñales vestidas con diferentes matices.
ResponderBorrarBesos, artista.
El otoño en tu blog es más bello.
ResponderBorrarBesos.
Qué belleza de imágenes.... El otoño es bello y si encima nos lo presentas así...
ResponderBorrarMuchos besos
El dorado del otoño, maravilla, entre ocres de cielos rojizos...
ResponderBorrarPasa un estupendo fin semana.
Saludos y un abrazo.
Maravillosas nubes. Ojalá sigan donándonos otoños.
ResponderBorrarUn haiku y un abrazo, para ti.
ResponderBorrarDorados, ocres
en cambiantes azules...
Blues de otoño.
será el otoño o esas palabras de lo invisible que nos hace palidecer..
ResponderBorrarbesos Virgi..adoro tus post...ya te lo había dicho?
Otoño con nubes color ocre sobre un cielo azul cansado. Rojizos que se desploman al avance de la noche. Preciosas las fotos que se desperezan entre la hermosura que albergan.
ResponderBorrarMe has hecho respirar el otoño de tu cielo, el que ampara tus islas.
Un besico, querida Virgi.
Princesa Virgi. Eran hojas, eran nubes. Eran Silencio. Eran tus sueños, paseando con los míos por los espacios siderales.
ResponderBorrarEstoy aquí. Contigo.
Un besote de nubes de barro y de lianas.
ResponderBorrar• En el bailes de disfraces, las cuatro estaciones tuvieron que escoger colores.
Al otoño le regalé unos millones de hojas verdes, amarillas, castañas, ocres, rojas.
Ahora tengo la ilusión de que el otoño baila para mi... bueno, y para los demás.
• Por lo que veo, una ráfaga de aire se llevó mis hojas de haya a teñir los cielos chicharreros.
• besos color siena
CR & LMA
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Nubes preciosas, cargadas de color.
ResponderBorrarA veces pienso que el otoño es la estación básica de la vida, y las otras tres son accidentes sobre ella.
Y de las nubes saltan como pequeños sueños los colores que visten tus palabras y nos regalas tú también, en ellas el otoño.
ResponderBorrarUn besiño, Canalla ;)
Que rojos más otoñales, es preciso este paisaje y esas nubes, me ha encantado!!
ResponderBorrarBesicos muchos
ya lo dijo ella, aquella chica francesa llamada Françoise, las nubes son maravillosas.
ResponderBorrarabrazos.
El otoño no podía haber buscado mejor heraldo que esas nubes.
ResponderBorrarQué bonitas. Son nubes de oro.
ResponderBorrarSí, eran nubes que soñaban ser hojas... o eran hojas volando junto a las nubes?. Lo cierto es que era otoño.
ResponderBorrarBesos
Nubes como hojas que se dejaban caer, igual que el otoño. Preciosas fotos, bonitas palabras.
ResponderBorrarUn abrazo otoñal con nubes o sin nubes, como prefieras,
Si, definitivamente me voy con las nubes, con esas de color encendido y algodonosas. Y con esas que se deshilachan pretendiendo alcanzar el invierno próximo y dejando el otoño algo desamparado. Pero ese otoño que nos ofreces tiene todavía mucho por hilar. Me encantan esas fotos y me gustan combinadas con tus palabras de poeta. Muchos besos otoñales.
ResponderBorrary son versos
ResponderBorrarsólo versos
los que doran
las nubes
mil besos,poeta*
Pero no te darán sus lágrimas: es sol lo que anuncian.
ResponderBorrar¿Y dónde consigues esos atardeceres/amaneceres? ¿Son sólo tuyos? Ya me gustaría...
ResponderBorrary tù me lo donaste a mì: ¡QUè belleza!
ResponderBorrarBesos
Las nubes son las hojas del cielo!
ResponderBorrarSiempre me gustaron: hace años podía pasarme mucho tiempo viendo como las nubes dibujaban y desdibujaban, pero ahora miro menos hacia arriba -una equivocación-.
Me has dado envidia: algún día haré una entrada con fotos de nubes de mi pueblo: tengo unas cuantas.
Mucha magia generan la unión de esas fotos y esas palabras.
Gracias por las que me dejaste.
Besos.
Qué preciosidad y me ha gustado mucho eso de "Me donaron el otoño" un broche perfecto.
ResponderBorrarCariñitos
¿No sabes que colecciono atardeceres? Estos tuyos me han encantado.
ResponderBorrarUn abrazo
Querida Virgi
ResponderBorrarY tú que decías que el otoño no se sentía por aquellas islas, mira nada más qué imágenes nos has obsequiado. Bellísimas... como para mí. Todas. Pero especialmente la última: pre-cio-sa.
Un besote
Unas nubes doradas preciosas. Tomaste fotos de un buen instante. El otoño dorado también, rojo y gris. Un bonito homenaje al otoño. Besos
ResponderBorrarVirgi, abrir tu blog es entrar en otro 'modo' mucho más relajado, armonioso. Nos invade la paz que confiere lo delicado. El esmero pulcro nos hace ir leyendo y disfrutando de puntillas como si, de no hacerlo, fuéramos a enfangar con los zapatos el suelo recién fregado. Realmente ¡eres una artista! Un abrazo: una admiradora
ResponderBorrarQué amarillas son las nubes de tu otoño, Virgi, parece que merendaron natillas
ResponderBorrarQué bonito es el otoño.
Un beso,
El otoño visto desde tus fotos parece algo necesariamente bello, algo que no importa que llegue, que caiga como caen las hojas de tus palabras. Besos.
ResponderBorrarMiguel Ángel para poner a prueba a sus alumnos les hacía dibujar nubes al natural, con el problema que esto supone, no paran de cambiar y la pintura no es la fotografía.
ResponderBorrarBesos entre cúmulos de otoño.
No sabría cuál escoger. En verdad que a través de tus ojos es bellísimo el otoño.
ResponderBorrarBesos y nubes
Leyéndote y viendo tus fotos me dan ganas de volver sobre mis pasos, tomar un tren y plantarme en la sierra. Allí donde los árboles te ahogan con sus colores.
ResponderBorrarEl otoño es una estación magnífica, como pasar por aquí.
Me has relajado.
A mi también me gustan las nubes...Los otoños ya sí no, me gusta el sol...los días claros... los nublados me deprimen.
ResponderBorrarHermosas fotos, Virgi.
Un besito.
Tanta belleza, es lo que pasa,
ResponderBorrarA veces, en octubre, es lo que pasa
Cuando nada sucede,
y el verano se ha ido,
y las hojas comienzan a caer de los árboles,
y el frío oxida el borde de los ríos,
y hace más lento el curso de las aguas;
cuando el cielo parece un mar violento,
y los pájaros cambian de paisaje,
y las palabras se oyen cada vez más lejanas,
como susurros que maneja el viento;
entonces,
ya se sabe,
es lo que pasa:
esas hojas, los pájaros, las nubes,
las palabras dispersas
y los ríos,
nos llenan de inquietud súbitamente
y de desesperanza.
No busquéis el motivo en vuestros corazones.
Tan sólo es lo que dije:
lo que pasa.
Ángel González
Besos
Hasta las nubes absorben los colores y la luz del otoño, como tus mirada y tus palabras.
ResponderBorrarGracias por "donarnos" nubes maduras de otoño tan bellas.
Te podría hablar yo de nubes. Pero todo el año!
ResponderBorrarEstoy deseando darte ese abrazo ya, ya... Y si me recibes con un otoño tan bello, será el colmo. Hasta dentro de dos días, querida amiga.
ResponderBorrarQuerida Isabel, en estos días no tengo suficiente tiempo para contestar como me gusta, pero acabo de ver tu comentario y no pude resistirme. Estaré allí, acompañándote a ti y a la Reina Dido. Seguro que saldrá todo estupendo. Un abrazo grande, buen viaje.
ResponderBorrarEl otoño es eso, una rasgadura ocre en los colores.
ResponderBorrarMe quedo colgada de tus nubes...¿o son hojas? Da igual, son tan magníficas!
ResponderBorrarBesos, preciosos cielos.
Yo vi unas nubes bailar el otro día... vaya meneo llevaban!
ResponderBorrarBesicos
Las fotos son perlas mágicas; el texto, poesía. Es el otoño que nos ayuda a ser más poetas.
ResponderBorrarSerán sólo nubes, pero son preciosas. Tal vez es porque me encantan los colores del otoño.
ResponderBorrarBesos
Me encantan los verdes en el cielo. Es el color que nunca les imaginamos. Yo ni creía en ellos hasta que un día vi uno descrito en un relato del Padre Brown, de Chesterton.
ResponderBorrar¿Es cuestión de madrugar o de observar los atardeceres?
ResponderBorrarPreciosas la fotos, seguro tienes más?
un otoño dorado como el oro y con una luz maravillosa.
ResponderBorrarprobablemente hayas pasado por ese puente, si, y te me haces mas cercana pensando en que lo has cruzado y pisado mi tierra.
graciñas :)
Un bellísimo poema. Tienes la particular virtud de llegar, con tus poemas, hasta el fondo del alma. Abrazos.
ResponderBorrarCada fotografía, un haiku de otoño. Ni el mismísimo Basho podría haberse resistido a esos crepúsculos. Habría detenido sus pasos y, tumbado bajo el cielo, habría dejado que las hojas secas cubriesen su túnica.
ResponderBorrarBesos de atardecer
El otoño es mi estación favorita.
ResponderBorrarLas fotos son preciosas.
Ayer fotografié con el móvil un amanecer rojo intenso.
El otoño nos llena de colores y tus palabras de preciosas sensaciones.
Besos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
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ResponderBorrarCreía que mis cielos preferidos eran los del invierno, pero veo que no.Me cuelgo de los tuyos.
ResponderBorrar(lo siento, me equivoqué un par de veces)
nubes rules.
ResponderBorrarAhora, como mucho, aunque esté mal, con las prisas, sólo puedo copiar y pegar a todo el mundo el mismo cuento. Son un número enorme de blogs los que habitualmente sigo.
ResponderBorrarPero volveré, apenas en cuatro o cinco días.
Un abrazo.
Preciosas, Virgi, no nos cansamos de contemplarlas, es un regalazo para nuestros ojos
ResponderBorrarBesotes
Merce
Creo que ya se ha dicho, pero no me importa repetirlo. He aquí dos magnificas donaciones: la que te hacen las nubes del penúltimo tramo del año, la que tus nos haces con imágenes y palabras tan bien acordadas. Donaciones, dones. Un abrazo.
ResponderBorrarQue las nubes otoñales, cargadas de lluvia y besos, les sean propicias.
ResponderBorrarGracias por venir. Una vez más.
MAGNÍFICO.
ResponderBorrarUn placer haber pasado por tu espacio.
Me gustan las nubes rojas de las tardes de verano, y me gusta verlas pasar como pasan las estaciones.
Te sigo
Una sorpresa encontrarte. Te devuelvo la visita, gracias por venir.
ResponderBorrarBesos
¡Oh! Qué hermosura de nubes. Necesito urgentemente verlas.
ResponderBorrarEstaré más al pendiente.
Besos linda.
Querida Clarice, seguramente las nubes son bellas en todas partes. Y más en otoño. Pero si quieres verlas desde esta latitud, pues ya sabes.
ResponderBorrarUn abrazo grande.
Suele suceder, a veces... Las nubes bajas, cuando el sol se muere, resultan bellisimas...
ResponderBorrarPero nadie se suele fijar en ello...
Un abrazo en la distancia, amiga
Gracias, Antiqua, por tu rápida visita. Un abrazo, grande también.
ResponderBorrarSON PRECIOSAS LAS FOTOS. ¡Cuánto oro en el cielo!!!
ResponderBorrarY mientras aquí abajo, a ras de tierra de nuevo la obsesión por acaparar oro.
Porfa, ¿son nubes tinerfeñas?
¡Madre mía qué bonitas eran las de Lanzarote, y cómo corrían! Estuve viviéndo tre años en la isla y les hice hasta poemas a las nubes de Lanzarote. Me quedaba embobado mirándo al cielo.
No sabes cuánto me alegra encontrar a alguien que tampoco le importa perder su tiempo gozándo con los regalos del cielo.
Un besico.
que nubes cargas de poemas...!
ResponderBorrarrojas intensas como me gustan...
un beso