miércoles, 24 de marzo de 2010

Ocaso

Cruzabas el río. Lo habías hecho muchas veces, pero fue aquélla cuando te ví.
La capucha roja luchaba con el ocaso. Detrás, un niño a hombros y un paraguas a cuadros.




La tarde caía y yo con ella. Paseé, melancólica.
Volví al puente. Me apoyé en la barandilla.


Contemplé las aguas, plácidas, y los patos, untuosos y ligeros. Mis recuerdos eran como las sombras chinescas, siluetas detrás de un imposible. Se movían, negras, misteriosas, inalcanzables.



Fotos, Virgi

84 comentarios:

  1. Lindas fotos y la sensación de pasear en el relax muy bonito. Un abrazo

    ResponderBorrar
  2. Bonito ocaso.
    Es como una exposición.
    Bellísimo.

    Besos.

    ResponderBorrar
  3. Es un ocaso, pero me sienta en el alma como un amanecer.

    Besos

    ResponderBorrar
  4. tu ocaso es cinematográfico.
    me gustó mucho el incio, en primera persona, dirigiéndose a ese personaje que anda en bici...y aquí empiezo a seguirte en tu paseo por el borde del río, y a ver tus recuerdos...

    bellísimo!

    mil besos*

    ResponderBorrar
  5. Un poco cinematográfico según dicen, pero yo destaco su vena poética un poquito triste. Un hermoso amanecer, amiga. Gracias por los versos de Rilke.

    ResponderBorrar
  6. La tarde se termina y yo con ella. Yo.
    Tu renaces en cada escrito, incluso nos das vida a los demás.

    ResponderBorrar
  7. me encantan tus foto-miradas, virgi!
    La sensación es parecida a la de contemplar un río: hipnosis, paz, huida involuntaria.
    Besos y atardeceres

    ResponderBorrar
  8. Querida Virgi

    Amo las imágenes y sensaciones emanadas del ocaso. Ya sea al lado de un río, como en el caso de tus bellas imágenes, o a la orilla del mar -en la costa del Pacifico Sur mexicano los ocasos suelen ser mágicos-, el ocaso me embelesa.

    Tus fotos y tus palabras, conllevan una muy grata sensación de melancolía y paz interior que engancha.

    Un beso

    ResponderBorrar
  9. Hermoso paseo que he podido dar gracias a ti antes de irme a la cama...Un texto ligero, rico, repleto de sensaciones hermosas... como siempre que vengo acá me voy en las nubes.
    Un besito.

    ResponderBorrar
  10. me gusta pensar que una tarde saliste a caminar con la camara en mano y ahora compartimos lo que se cruzaba por tus pensamientos en ese momento.
    saludos desde lejos.

    ResponderBorrar
  11. Mis colores favoritos unidos a la pura poesía de tu mirada. Un tesoro.

    Bikiños Vir ;)

    ResponderBorrar
  12. "La tarde caía y yo con ella"...
    Poco más puedo agregar a tanta belleza. Tú, Virgi, sí, esas fotografías maravillosas, esas imágenes que se enlazan a palabras tan bellas.
    Un abrazo muy fuerte.

    ResponderBorrar
  13. Insisto: excelente edición fotográfica y textos sublimes. Hay demasiado estilo, sencillez y creatividad en lo que plasmas.

    besos, Monique.

    ResponderBorrar
  14. Poesía y foto.
    Phoetico como tublog.

    Besos.

    ResponderBorrar
  15. Suave cadencia de imágenes que sabes acompañar con las justas palabras.
    Una sonrisa

    ResponderBorrar
  16. Virgi, tienes la poesía en la mirada y en la palabra. Pedazo de poeta. Te admiro.

    Besos

    ResponderBorrar
  17. los puentes y el agua removida son como una pantalla de cine para la nostalgía, ¿verdad?

    ResponderBorrar
  18. Y estas originales composiciones tambien me gustan jajaja, una historia en imagenes bien hilada :)

    Mas biquiños

    ResponderBorrar
  19. Me ha gustado mucho, Virgi.
    Si no fuera por este blog me perdería muchos paseos interesantes, el de hoy ha sido melancólico.Casi mis favoritos.
    Besos.

    ResponderBorrar
  20. A veces me da vértigo pensar que una mirada esencial se me escapó y que la sincronicidad no existió, pero llego a la conclusión que aquello que no fue es porque no debía ser. También, me gustaría ser el ojo cinematográfico que todo lo ve y que converge historias.
    Inuits

    ResponderBorrar
  21. El Drac, mcho más lindo es ver ese piececito entre las manos. Muy tierno, como tú, creo. Besitos.

    Gracias siempre, querido Toro. Tan gentil y puntual. Besos también para ti.

    ResponderBorrar
  22. ¡Vaya, Athena, que bien me sientan tus palabras! Te las agradezco mucho. Un abrazo grande.

    Bueno, Rayuela, pues lo consideraremos como un trailer. A ver si consigo ampliarlo. Besos, tesoro

    ResponderBorrar
  23. Sí, Mateo, algo nostálgico me quedó. Y las sombras creo que acentúan esa sensación. Un abrazo entre el alba y el ocaso.

    Querida María Jesús, no creo que tú acabes con la tarde, precisamente...¡con la vitalidd que nos transmites! Gracias, maravilla

    ResponderBorrar
  24. Hola Alicia, este encantamiento es recíproco, entonces, porque mira que escribes cosas bellas! Un fuerte abrazo, :) :) :)

    Marichuy, debe ser un goce disfrutar de los atardeceres en ese lado del mar. Por otros comentarios ya sé que tienes muchos recuerdos de la cercanía oceánica. Muchos besos, cielito

    ResponderBorrar
  25. Aroa, una estupenda alegría verte otra vez...¡hacía tanto, poeta!
    Gracias, besitos besitos.

    Querida Zayi, parecido me pasa contigo. Buen empate entre las nubes. Sigamos en ello, linda, besos a montones

    ResponderBorrar
  26. Sandocán, tu pedaleo ha hecho que nos encontremos. Envidia me das, te veo libre y risueño, hermosas cualidades. Bienvenido, espero seguir tus huellas.

    Mayte, también el rojo es mi color favorito. Tesoro es mirar desde tu ventana, tierna y sensual, epidérmica y amorosa. Besos, besos, besos.

    ResponderBorrar
  27. Isabel, muy generosa y entusiasta, para mí es un placer leerte, así que seguimos en esta conexión mágica y tentadora, un abrazo grande, pero grande, cielito.

    Monique, con tu bagaje lector, sí que me hacen un honor tus palabras. Ya compré hoy mismo el de Berger al que hace referencia. Un lujo, gracias por todo.

    ResponderBorrar
  28. Estimado Ybris, ya sabes que tus visitas son inestimables. Ver esa "Y" siempre me da un vuelquito de emoción. Darte las gracias no es suficiente. Me gustaría acompañarlas con un fuerte abrazo. Y mi admiración.

    ResponderBorrar
  29. Sonriente Ilia, la cadencia de tus palabras sí que es muy bella. Espero a que salgas del hammán para seguir leyéndolas. Muchos besos.

    Pero Trini, ¿cómo puedes decir eso? ¡La pedazo de poeta eres tú, muchacha! Yo sólo intento poner palabras a las fotos que hago...
    Gracias y gracias. Besos y besos

    ResponderBorrar
  30. Pues sí, Beauséant, los puentes tienen algo de nostalgia y de melancolía. Será por eso de que ven pasar el río de la vida? Un abrazo tierno

    ¡Hola Merce! veo que mr has hecho unas preciosas y simpáticas visitas. gracias por tus piropos, tan cariñosos. Besos te van desde el puente.

    ResponderBorrar
  31. Querida Reyes, una satisfacción que te guste. Yo te leo cada nueva entrada, me conmueve tu sensibilidad, me alegra tu humor. Muchos besos, princesa.

    Inuit, gracias por volver, linda esquimalita. Lo que no se da es por algo, esperemos por lo que viene. La sincronicidad no siempre es la que buscamos, muchas veces aparece sin esperarla. Un abrazo.

    ResponderBorrar

  32. También Tacirupeca Jaro tiene una caperuza roja. En ese cielo que dices, todo es rojo y ya no hace falta la esperanza.
    Es cierto, los recuerdos son sombras chinescas, cambiantes... a veces amenazantes.
    ¿Los recuerdos de los chinos... chinescos?

    un beso

    CristalRasgado & LaMiradaAusente
    ________________________________

    ResponderBorrar
  33. Me gustan todas las fotos, pero la última con la persiana azafrán me ha fascinado...

    bss

    ResponderBorrar
  34. Querido Ñoco, recuerdo que colgaste algo muy simpático de Tacirupeca Jaro. No sé si incluso el cuento empezaba con el lobo ahogado en el río, lleno de piedras por malo, malísimo.
    Los recuerdos de los chinos no sé, pero de tiendas sí que nos están saturando. Besitos rojos y tiernos.

    ResponderBorrar
  35. ¡Hola Bohemia! Un placer tu visita, hacía tanto! A mí me entretiene mucho la persiana. Cuando hay brisa, las sombras cambian, parece un teatrillo chino. Un abrazo

    ResponderBorrar
  36. El rojo contrastado con los colores del ocaso forma una pátina que respira melancolía. Luego paz, ligereza, placidez... Al final sueños...sombras... Me fascina Virgi. El paseo encantador como lo es tu poesía.
    Un abrazo envuelto en sombras chinescas.

    ResponderBorrar
  37. Los recuerdos difusos hacen que inventemos un mundo de un instante nublado que nos marcó.

    Fascinantes fotografías Virgi.

    ResponderBorrar
  38. La serie es muy buena. La última es excepcional.

    ResponderBorrar
  39. negras y misteriosas y melancólicas?
    es una entrada bellísima, que sé voy a leer más de una vez.
    un abrazo fuerte

    ResponderBorrar
  40. Recuerdos como sombras chinescas... Qué bueno. A mí también me pasa a veces que, de pronto, recuerdo como en oleadas, y sé que el recuerdo se refiere a un momento concreto pero no acabo de definir cuál

    ResponderBorrar
  41. En esos paseos melancólicos captas muchas cosas y piensas otras tantas. Luego las compartes y todos somos, un poco, paseantes al caer la tarde. Besos, Virgi

    ResponderBorrar
  42. No tengo perdón, llego de las últimas pero es que me suelo dejar el postre para saborearlo mejor si cabe;)

    Hoy, me quedo con esas sombras chinescas que juegan siempre al escondite tras las persianas de la memoria como bichitos inalcanzables, patitos, o siluetas impenetrables.

    Un besazo.

    ResponderBorrar
  43. Hacia el ocaso apunta siempre el corazón.
    Las sombras chinescas son parte de su escenario.
    El puente une, incluso a los que se sueñan sin encontrarse.
    Llevaba un buen rato observándole desde el otro extremo del puente, escondida bochornosamente detrás de una farola. El inicio de una novela.
    (Qué sugerentes imágenes)
    Un abrazo.

    ResponderBorrar
  44. Tanci, seguiré paseando y encontrándonos. Unas veces con el mar de fondo, otras con la luna...
    Gracias por la placidez.

    Querida Carmen, vienes envuelta en oro, tu cabellera resplandece con ese amarillo de fuego que te ilumina. ¿Sabes esa luz también me llega? Mi agradecimiento siempre.

    ResponderBorrar
  45. Hola Pedro, has hecho todo un recorrido que te agradezco mucho. En verdad, es un gozo que dejes aquí las gotas sabias de tus palabras. Un fuerte abrazo.

    Momo, me alegra saber que vienes y quieras, incluso, volver. Yo he hecho lo mismo con tu emocionante entrada. Muy didáctica, no debemos perder esa memoria. Muchos besos, tesoro.

    ResponderBorrar
  46. Querido Miguel, con esas oleadas nos das sabrosos frutos...¡sólo hay que visitarte para quedar ya enganchados!
    :) :) :)

    ¡Hola Ginebra! Entoces imaginaré en el próximo paseo que voy con alguien más. Ya te llevo, entonces, conmigo. Una compañía deliciosa, besitos, maravilla.

    ResponderBorrar
  47. Besazos y achuchones para ti, ojazos de inteligencia, Zarzamora ocurrente y vivaz. Por muy tarde que llegues, siempre es una monada que vengas. Más besos, cielo.

    ResponderBorrar
  48. Muy querido Fernando, hasta en los comentarios dejas hermosos pensamientos. Eres un lujo, mi niño, y me alegra haberte visitado casi desde que empecé con ésto.. bueno, un lujo, un placer, una gozada, un plus...
    Gracias.
    Montones.

    ResponderBorrar
  49. Me encato la composicion de las fotos y ese texto que te abraza dulcemente.

    Desde una habitacion en la joven Buenos Aires te dejo un calido beso

    ResponderBorrar
  50. Muy bonitas fotos (de dónde son?) y como siempre, muy bonito texto.
    Me gusta pasear contigo.

    ResponderBorrar
  51. Simplemente, me inspiras.
    Jugamos al mismo juego de imágenes y palabras. Es nuestra parte de infancia que compartimos.

    ResponderBorrar
  52. Este paseo que nos regalas lo encuentro de lo más sugerente. El ángulo de la barandilla tiene muchas lecturas. No me pierdo ni una de tus entradas.

    ResponderBorrar
  53. ¿Para los recuerdos también hay ocasos? ¿O serían olvidos sepultados en el inconsciente?
    Ojala pudiéramos disfrutar la tristeza y la melancolía como del bonito ocaso diario. Un aprendizaje que deberíamos asumir desde niños, a lo largo de una vida todo va perdiendo importancia.
    Un beso.

    ResponderBorrar
  54. Hola Forbidden, genial que te sumes a este paseo desde esa bella ciudad. Tienes la puerta y el camino disponibles para que vulevas, un saludo cariñoso.

    Linda Sue, me encanta tu compañía. Las tres primeras son de un par de ciudades alemanas donde estuvimos en navidad (le saqué mucho partido a esos días, la verdad). Gracias y besos.

    ResponderBorrar
  55. ¡Vaya un tesoro que eres, Fernando! Nada como compartir los mismos juegos, siempre he pensado que son importantes para madurar. Seguimos en ello, maravilla, mil gracias por tu gentileza. Besos y ternura.

    ResponderBorrar
  56. Hola Edgar, ya sé bien de tu fidelidad, aunque no pueda corresponderte...espero hacerlo algún día adecuadamente. La barandilla es de un puente sobre el Elba. Un abrazo.

    Muy querida Gaia, tienes razón, según pasa la vida las cosas realmente importantes se van reduciendo a muy pocas. ¡Cuánta energía gastada en el resto! Me enriquece tu sabiduría, un buen montón de gracias, besos, muchos.

    ResponderBorrar
  57. ¡Y yo pensándolo en Franncia, aunque las casas del fondo no me cuadraban mucho! gracias, Virgi

    ResponderBorrar
  58. El ocaso melancólico que brota sin cesar. Abrazos.

    ResponderBorrar
  59. Dan ganas de...
    concluir:
    ¿Tomamos un café?
    A mi me dan una terribles ganas de seguir contigo...
    mirando, lo que sigue.......

    ResponderBorrar
  60. cómo me gusta esta secuencia del puente, la capucha roja, y esa luz a la vez dejada y penetrante del atardecer. la melancolía es a veces tan hermosa, tan profunda y creadora, que no queda más remedio que rendirse y morir un instante..
    cómo me gusta tu sensibilidad..

    ResponderBorrar
  61. Un fuerte abrazo a tu vuelta, Edgar (las fotos de la France las pongo otro día).

    Fgiucich, la melancolía a veces es como un manantial sin fin, dices bien. Besos y cariños

    ResponderBorrar
  62. ¡Genial, MBI, me apunto a tu cita! ¿No podríamos quedar en algún cafetín de ésos del barrio turco de Berlín? Seguimos con el paseo y luego tomamos algo, ok?
    :) :) :)

    ResponderBorrar
  63. Querida Jin, ¡y no sabes tú lo que me alegra esa mano que aparece en los comentarios! Montón de gracias, alegres y risueñas, las melancólicas las dejamos pa' otro momento.
    Un abrazo fuerte

    ResponderBorrar
  64. .....Qué gozada Virgi.
    Hermosas imágenes y bellas plabras.
    Un lujo para la mente.
    Gracias corazón.

    ResponderBorrar
  65. Qué bello ocaso nos regalas virgi! Espléndidaas imágenes.
    Por cierto estuve viendo el vídeo de la mina que me indicaste.
    Terrible y precioso. son unas gentes humildes que no tienen más que una montaña y les van a dejar sin nada!!!
    Ves lo que escribí? Así ocurre en todas partes en el mundo, y por eso la naturaleza está desequilibrándose, al tiempo que lo hace la humanidad. Sólo unos pocos se benefician.
    Haya que acabar con tantas injusticias, pero... cómo???
    Un placer visitarte.
    UN abrazo.

    ResponderBorrar
  66. No sé que tienen los puentes, Virgi, quizá el pasar de una orilla a otra; que hace que sintamos esa melancolía por lo que se deja en el otro lado

    Un abrazo

    Merce

    ResponderBorrar
  67. Hola preciosa, me siguen encantando tus entradas, tan suaves y a la vez tan precisas...

    Un montón de besos atrasados...
    :)

    ResponderBorrar
  68. Querida Tecla, el lujo es el mío por tu ternura y sensibilidad, cielo. Gracias. Muchos besos

    Moderato, me alegra mucho que hayas visto el vídeo...¡cuánta gente pasando penas! Y los poderosos obviándolas. Es un vídeo impactante, una maravilla la opinión y la sabiduría de todas esas personas.
    Agradezco mucho tu comentario, un fuerte abrazo.

    ResponderBorrar
  69. Hola Merce, algo de éso tienen los puentes, sí. Y si por debajo pasa un río caudaloso, yo siento también como un vértigo especial. Besitos, buena semana.

    Querida Kat, antes de contestarte ya he ido a verte. ¡Me ha encantado tu entrada, te extrañaba! Un abrazo grande, besos y cariñitos

    ResponderBorrar
  70. Torneo de Caballeros:
    Una idea muy caballeresca, a tono con vosotros, ¡vive Dios! pero me sería muy difícil proponer dos blogs, hay tantos excelentes!
    Lo pensaré, gracias por contar conmigo, un saludo.

    ResponderBorrar
  71. Un placer siempre pasar por tu espacio... y llevarme estas cositas para mi.

    Saludos y un abrazo enorme.

    ResponderBorrar
  72. He vuelto a pasar por aquí porque me encantan las fotos...

    ResponderBorrar
  73. Cuanta melancolía. A ver si te nos vas a suicidar.

    ResponderBorrar
  74. Hiperión, sabes que tienes la puerta abierta...besos y besos (llévalos también contigo)

    Querida Sue, un placer renovado verte de nuevo. Seguimos en el paseo, que nos lleve sin rumbo, a ver qué tal. Un abrazo, guapísima

    Hola Federico, la melancolía me la transmiten las fotos, don't worry.
    Una cosa es lo que escribimos, otra lo que somos, a veces coinciden, otras, no. Muchos besos, gracias por tu sentido del humor, te mando la sonrisa que me produjo tu comentario. Espero que te llegue

    ResponderBorrar
  75. Preciosas fotos y precioso recorrido a la par. Me he paseado de tu mano.

    Virgi, ya quiero dejar la manzana y el gusanito, pero estoy con un trabajo que me tiene ocupada de día y de noche, además del trabajo diario y la rutina. Cuando esté terminado y si todo sale como quisiera, os cuento de que va, aún está en paños menores y no quiero precipitarme, lo que si te aseguro, es que me tiene muy ocupada y con el tiempo muy limitado, pero te agradezco tu interés.
    Besicos muchos preciosa.

    ResponderBorrar
  76. Hay paseos y miradas que únicamente pueden hacerse en soledad.Las nostalgias se alargan en esas sombras chinescas y se disfruta de una pequeña tristeza contenida.
    Me encantó Virgi.
    besos

    ResponderBorrar
  77. Nostaljicas imajenes, májicos versos... que diría el de Moguer.

    Un besote.

    ResponderBorrar
  78. Te encontré en el blog de Rubén y estoy merodeando en el tuyo. Me ha encantado y quiero decírtelo. Fotos y textos preciosos.
    Y me atrevo a invitarte a dar un paseo primaveral por el mío.
    Saludos poéticos. Soco

    ResponderBorrar
  79. Hola, Virgi. Paseaba por aquí y ahora retorno con tus sombras chinescas tranquilo, reconfortado. Y melancólico.

    ResponderBorrar
  80. Querida Nani, gracias por tus explicaciones. Seguro que lo que te traes entre manos será muy interesante. Me lo da el olfato. Muchos besos

    Alex, mi renacentista, un abrazo a tu visita. La melancolía se pega, no hay que frecuentarla mucho, menos mal que viniste al final. Besitos, :) :) :)

    ¡Pues no se me había ocurrido, Manolotel! Jenial, je, jigantesco ese hombre. Muy orijinal tu comentario. Un abrazo

    ResponderBorrar
  81. ¡Muy bienvenida, Soco! Me ha gustado tu visita y tu blog. Te tengo fichada ya. Gracias por venir, tienes la casa a tu disposición. Un fuerte abrazo.

    José Zúñiga, he estado a punto de visitarte varias veces, porque me gustan tus comentarios en otros blogs y ahora te me has adelantado. Bueno, todo un gentil caballero viniendo, gracias. En un momento te devuelvo la visita. Besos besos

    ResponderBorrar
  82. Lindo.

    Obvio, me robé la foto de la bici.

    Besotes.

    ResponderBorrar
  83. ¡Fíjate, Clarice, y no se me había ocurrido que la de la bici te pudiera ir bien!
    Pues me alegro que la uses.
    Un abrazo, linda

    ResponderBorrar